De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud. La causa fundamental de esta problemática es un desequilibrio energético entre calorías consumidas y las gastadas.
En el mundo esta problemática va en ascenso y cada vez es más frecuente en los menores de edad.
La responsable estatal de nutrición del programa de la infancia y adolescencia de la Secretaría de Salud, Liliana Bedolla Cruz, informa que el sobrepeso y obesidad infantil no solo implica exceso de peso, sino que puede llevar al desarrollo temprano de alteraciones metabólicas y enfermedades crónicas como la diabetes.
“La obesidad infantil en los niños, pues es un problema muy grande de salud pública, en donde nos trae aparte de las características del exceso de peso, pues también nos puede llevar al desarrollo temprano de alteraciones metabólicas como es el caso de triglicéridos elevados, presión arterial elevada o bien presentar resistencia a la insulina, que es un dato previo a diabetes en donde los chiquitos tienen problemas para metabolizar los carbohidratos, las azucares”.
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012 destaca que el 32.3 por ciento de niños menores de cinco años tienen sobre peso y obesidad, estas mismas circunstancias se ven reflejadas en un 26 por ciento de niños de 5 a 9 años.
La nutrióloga Liliana Bedolla refiere que el estado de Querétaro se encuentra dentro de la media nacional en el tema, asimismo sostiene que los servicios de salud tienen en control a 8 mil 174 menores de cinco años y a 12 mil 998 niños de 5 a 9 años con sobre peso y obesidad.
“En Querétaro estamos dentro de la media nacional, también contamos con un 32 por ciento de niños menores de cinco años con sobrepeso y obesidad; y además en los servicios de salud tenemos en control a alrededor de ocho mil pacientes, ocho mil niños menores de cinco años con sobrepeso y obesidad que acuden a las unidades de salud a pesarlos y a medirlos y de acuerdo a estos parámetros hacemos el diagnóstico de que presentan algún grado de sobrepeso y obesidad y los tenemos en control”.
Destaca que los factores que llevan a este desorden en la alimentación son los malos hábitos como no tener horarios específicos de comidas, consumir grandes cantidades de azúcar o alimentos que no son aptos para su edad y también el sedentarismo.
Por ello, considera importante que los padres de familia motiven a sus hijos a practicar un deporte o una disciplina además de las actividades que realizan en la escuela, asimismo recomienda a preparar un lunch diario que incluya frutas y verduras.
«Es muy cierto que mínimo se tienen que consumir cinco porciones de fruta en el día, tres verduras y dos frutas. A parte que le prepare el lunch para la escuela, el hecho de que la mamá le prepare los alimentos para que se los lleve a la escuela es totalmente diferente, la calidad de los mismos, que los que compra en alguna cooperativa escolar; entonces de preferencia que siempre vaya el niño con un lunch preparado en casa, que incluya por ejemplo, un sándwich, una fruta y una botella de agua simple».
Los niños tienen una idea general de lo que es una comida saludable y los efectos positivos que esta conlleva, así lo exponen Constanza, Andrés y Paulina, menores de 7, 9 y 11 años.
«Es como rico para que te haga bien y no chatarra porque luego te está engordando, entonces la zanahoria te puede hacer bien porque también te puede ayudar al cáncer y los pepinos pueden ser para tus ojos y a mí me encanta la cebolla, porque la cebolla te cura los ojos», comenta Constanza.
«Comer frutas y verduras, hacer cosas saludables, para estar saludables también se podría hacer ejercicio», refiere Andrés.
«La mayoría de las veces como cosas saludables que me dan energía y me ayudan a mi cuerpo», destaca Paulina.
También comparten sus hábitos de alimentación al acudir a la escuela.
Constanza: «Me pone zanahoria, pepino y fresas, a veces me pone manguito y a veces me pone atún».
Andrés: «Me dan dinero y lo que generalmente compro es lo que llevan de comer, a veces llevan jícama, piña, también la compro y agua».
Liliana Bedolla llama a estar atentos a las rutinas de los menores de edad, asimismo exhorta a eliminar la creencia de que un niño con sobrepeso es un niño sano, o la ideología de que cuando crezca bajará de peso.
“La obesidad infantil es un tema muy importante, que si tenemos a un niño en casa que vemos que presenta sobrepeso es importante que se atienda, porque tenemos la idea de que la obesidad en un niño es saludable, y a veces también tenemos la creencia de que ah, tiene sobre peso está bien y cuando crezca va a bajar de peso y no, es un problema que se tiene que atender desde la edad más temprana posible porque si no repercute en el desarrollo físico, el desarrollo mental del niño y sobre todo en la salud».
El sobrepeso y la obesidad infantil se pueden combatir con los buenos hábitos; comidas saludables, ejercicio y actividades físicas pueden hacer la diferencia.
Por: Iraí Silva
