Corea del Norte volvió a enviar hacia el Sur globos cargados con basura, pero esta vez cayeron en el complejo presidencial de Seúl, dijeron los responsables de seguridad, que movilizaron equipos especiales para recoger los restos.
Es la décima ocasión este año que Pyongyang lanza globos cargados de residuos hacia Corea del Sur, a priori en respuesta a la propaganda emitida por Seúl contra el régimen de Kim Jong Un.
Pero por primera vez estos peculiares envíos han llegado a la oficina presidencial en Seúl, habitualmente custodiada por numerosos soldados y protegida por una zona de exclusión aérea.
«Después de una investigación, los resultados han confirmado que no había peligro o infección en el objeto», agregó.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur había informado previamente de un nuevo envío de globos desde el Norte y las autoridades de Seúl emitieron una alerta el miércoles por la mañana.
En respuesta a los miles de globos enviados por Pyongyang desde mayo, Corea del Sur reanudó a «pleno rendimiento» las retransmisiones de propaganda a través de altavoces colocados en la frontera y dirigidos hacia el norte.
Esta práctica, que se remonta décadas atrás hasta la guerra de Corea, enfurece a Pyongyang, que previamente había amenazado con lanzar ataques aéreos contra estos altavoces.
Excelsior
