El Paquete Económico 2025 será fundamental para aclarar las dudas generadas por la reciente expansión del déficit fiscal. A pesar de esto, no habrá penalización por el incumplimiento de metas específicas.
México enfrenta varios desafíos para mantener su calificación soberana en «BBB-» con perspectiva «estable» por parte de la agencia Fitch. Entre ellos están el impacto de las reformas constitucionales en la institucionalidad, una ruta creíble de consolidación fiscal, evitar un aumento acelerado de la deuda y aprovechar las oportunidades del nearshoring.
Carlos Morales, director de análisis soberano para América Latina en Fitch, explicó que la actual calificación de México es «BBB-» con perspectiva Estable, revisada cada seis meses. El Paquete Económico 2025, que se conocerá en el último trimestre del año, será crucial para aclarar cómo se logrará la consolidación fiscal tras la expansión del déficit de este año.
Pemex y el riesgo soberano
Morales advirtió que la calificación actual de México incluye el apoyo financiero continuo del gobierno a Petróleos Mexicanos (Pemex), lo cual no se espera que cambie significativamente. Fitch estima que la deuda de México alcanzará cerca del 48% del PIB este año, sin incluir las obligaciones de Pemex ni de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Institucionalidad y gobernanza
Una parte significativa de la calificación soberana está vinculada a los indicadores de gobernanza del país, medidos por el Banco Mundial. México tiene uno de los niveles más bajos de institucionalidad en estos indicadores, lo cual ya está reflejado en su calificación soberana.
Nearshoring y oportunidades de crecimiento
El nearshoring, o relocalización de cadenas de suministro, es una oportunidad positiva para aumentar la capacidad de crecimiento de la economía mexicana a mediano y largo plazo. De completarse, fortalecerá las finanzas públicas al incrementar la disponibilidad de recursos para la recaudación.
Información de la mano con El Financiero
