Tras ser golpeadas por un sismo, las aldeas en las montañas en el noroeste de Nepal, están recibiendo poco a poco ayuda.
Destacar que el temblor de magnitud 5,6, registrado apenas unos minutos antes de la medianoche del viernes, mató a 157 personas, hirió a decenas más y dejó a miles sin hogar.
El Servicio Geológico de Estados Unidos situó el epicentro a una profundidad de 18 kilómetros (11 millas).
El Centro Nacional de Investigación y Seguimiento de Terremotos de Nepal confirmó que el epicentro se ubicó en Jajarkot, unos 400 kilómetros (250 millas) al nordeste de la capital, Katmandú.
Las autoridades continuaban el lunes con los esfuerzos por llevar comida y otros suministros, carpas y medicamentos a los poblados remotos, muchos accesibles sólo a pie.
También había carreteras bloqueadas por aludes de tierra provocados por el sismo. Podían verse soldados tratando de despejar carreteras bloqueadas.
Los equipos de búsqueda y rescate dijeron el lunes que la primera parte de su misión —rescatar sobrevivientes, llevar a los heridos a donde pudieran ser atendidos y buscar cuerpos— había terminado.
“Ahora trabajamos en la segunda fase de nuestro trabajo para entregar material de alivio, llevar ayuda a los aldeanos y al mismo tiempo reunimos detalles sobre los daños”, indicó el funcionario del gobierno Harish Chandra Sharma.
El Centro Nacional de Operaciones de Emergencias en Katmandú dijo que además de los 157 fallecidos había al menos 256 heridos y 3.891 casas dañadas.
En Chepare, la gente removía el lunes entre las pilas de piedras y troncos que antes formaban sus hogares buscando cualquier cosa que pudieran salvar.
Con información de AP News.