En Texas, congresistas estatales aprobaron una ley que prohíbe la transición de género para menores de edad, con tratamientos hormonales o quirúrgicos.
La legislación prohibirá que los médicos prescriban este tipo de tratamientos, aunque se prevé una excepción para los menores que ya estén en algún tratamiento, pero deben «abandonarlo» de forma progresiva, según el documento expedido.
Cabe señalar que para que esta propuesta se convierta en ley, debe ser firmada por el gobernador republicano, Greg Abbott, lo que parece ser solo una formalidad dada su posición sobre este tema.
El gobernador hace un año pidió investigar a los padres de los menores que reciben este tipo de tratamiento, equiparándolo al abuso infantil, lo que obligó a algunas familias a huir del estado.
Si la ley se promulgada, Texas se convertiría en el segundo estado estadunidense más densamente poblado y el más grande en adoptar una política como esta, pero no el único.
Ron DeSantis, gobernador de Florida firmó una ley votada a inicios de mayo que prohíbe los tratamientos hormonales y quirúrgicos de transición de género a menores de edad.
«Se trata de un ataque contra la libertad», denunció Joe Saunders, de la asociación Equality Florida, defensora de los derechos de la comunidad LGBT+.
En total unos 15 estados han adoptado restricciones de este tipo.
Con información de Excélsior.
