El Gobierno sueco volverá a enviar este año a sus ciudadanos un manual sobre cómo actuar en caso de conflicto bélico, tres décadas después de la última publicación de un manual que se empezó a difundir durante la II Guerra Mundial. Unos 4.7 millones de hogares recibirán a finales de mayo la versión actualizada de ‘Om kriget kommer’ (Si llega la guerra), guía ilustrada con información práctica para la población que se envió por primera vez en 1943, en medio de un conflicto bélico en el que Suecia fue neutral, y que siguió difundiéndose en la Guerra Fría. La Agencia sueca para contingencias civiles, dependiente del Ministerio de Defensa, es la encargada de elaborar el folleto, cuya publicación el Gobierno justifica por el empeoramiento de la seguridad en Europa y, en especial, en el entorno más próximo de Suecia, en alusión a las tensiones con Rusia.
La guía, cuyo título podría ser cambiado, pretende aumentar el conocimiento de la población sobre cómo reaccionar si se producen crisis o situaciones que exigen una rápida movilización y forma parte del plan para reforzar la defensa civil, explicó hoy en su edición digital el diario Aftonbladet. El Gobierno ha sido claro en que hay que mejorar este tipo de información y la forma de difundirla. Puede ser sobre cómo actuar ante crisis en tiempos de paz, perturbaciones sociales graves por catástrofes naturales o si una institución social importante es atacada», dijo a ese diario la responsable de la guía, Christina Andersson.
Andersson reconoció que actualizar la información incluida en el popular folleto es un reto, aunque se pretende respetar el modelo de una guía con textos cortos acompañados de muchas ilustraciones. Entonces el foco estaba solo en la guerra, la sociedad de hoy en día es completamente distinta. La amenaza es mucho más compleja, con cambio climático, ataques terroristas, pandemias y campañas de desinformación. La gente necesita aprender más y saber cómo reaccionar», afirmó. Suecia, país neutral asociado a la OTAN, ha modificado su política de defensa en los tres últimos años, intensificando la colaboración con la Alianza y aprobando partidas adicionales para aumentar su presupuesto en este área.
Entre otras medidas destacan el envío por primera vez desde 2005 de un destacamento permanente a la isla báltica de Gotland, el restablecimiento del servicio militar obligatorio y un acuerdo parlamentario para permitir el despliegue de tropas de la OTAN en su territorio. En virtud de ese acuerdo Suecia organizó en septiembre pasado las mayores maniobras militares en 24 años, con cerca de 20 mil soldados y personal civil suecos, además de unos mil 500 militares de Estados Unidos, Estonia, Dinamarca, Noruega, Lituania, Francia y la también neutral Finlandia.
Fuente: Excelsior