Estos son los estados más inseguros y los más pacíficos en México
La violencia en México representó un daño económico alto para el país en 2016. El deterioro de la seguridad el año pasado le costó a los mexicanos 3.07 billones de pesos, lo que equivale al 17.6% del PIB del país, según datos del Índice de Paz en México (IPM) elaborado por el Instituto de Economía y Paz.
En 2016, México rompió con cinco años de mejoras en el índice de paz al registrar un deterioro de 4.3% en el IPM, el primer aumento desde que el país comenzó a recuperarse de la guerra contra el narcotráfico en 2012.
El deterioro de la paz en México se debió al crecimiento de 18% en los homicidios, de los cuales el 61% es resultado de ataques con arma de fuego, según datos del IPM. La tasa de homicidio por cada 100 mil habitantes fue de 15.6%, la mayor desde el peor año para la paz en México, 2011, cuando fue de 19.8 homicidios.
El deterioro de la paz representó 79 mil millones de pesos adicionales al costo anual en 2015, con lo que 2016 cerró con un costo acumulado de 3.07 billones de pesos. El 79% de esta cantidad proviene del impacto económico que tienen los crímenes violentos -asaltos, robos y violaciones- y de los homicidios en México.
Esto representa un costo de $25,130 por mexicano, cifra mucho mayor al salario promedio de los trabajadores en el país, que es de $11,213 pesos, según datos del Observatorio Laboral de la Secretaría del Trabajo.
Para medir el costo de la violencia en México, el Instituto de Economía y Paz evalúa una serie de repercusiones a la economía. Por ejemplo, el costo del homicidio, la principal razón del deterior de la paz en el país, incluye el costo que representa para una familia el asesinato de uno de sus miembros, la carga económica para los sistemas de justicia y policiales y la caída en la productividad derivada de la pérdida de un elemento de la fuerza de trabajo.
Y el costo de la violencia cambia en cada estado de México. El costo más alto de la violencia lo tiene Colima, el estado con la mayor tasa de homicidios en 2016, con un costo por habitante de $66, 500 pesos. Le siguen los estados de Guerrero, con $53, 600 pesos por habitante, y Baja California Sur con $50, 200 pesos.
En contraparte, Nayarit tiene el costo más bajo de violencia con 10,220 pesos per capita. Le sigue Chiapas con $11,850 y Veracruz con $12, 800 pesos por habitante.
Los estados más pacíficos y los más violentos
Por quinto año consecutivo, Guerrero se mantiene como el estado menos pacífico en México con un índice de 3.9; le sigue Colima (3.7) y Sinaloa (3.2).
Estos estados registran los índices más altos en tasa de homicidios: Colima con 77 homicidios por cada 100 mil habitantes, Guerrero con 62 y Sinaloa con 38.
«Colima es también el estado que mostró la mayor deterioración (de la paz) desde 2011, lo que significa que tiene niveles de violencia peores que los que tenía durante la guerra contra el narcotráfico», se lee en el IPM.
En contraparte, Yucatán es el estado más pacífico con 1.2. Le sigue Nayarit con 1.3 y Tlaxcala con 1.4.
Para determinar el deterioro en la paz, el Instituto de Economía y Paz mide cinco variables: la tasa de homicidio por cada 100 mil habitantes, la tasa de crímenes violentos -asaltos, robos y violaciones-, el tasa de crímenes cometidos con arma de fuego, el número de personas que van a presión sin una sentencia proporcional al nivel del crimen que cometieron y la tasa de extorsiones, crímenes relacionados con el narcotráfico y secuestro por cada 100 mil habitantes.
Fuente: Huffington Post
