Hace exactamente 78 años, el 3 de febrero de 1939, fue fundado el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el cual tiene el objetivo de investigar, conservar y difundir el patrimonio cultural con el que cuenta nuestro país, según indica la Presidencia de México.
Actualmente tiene bajo su resguardo un total de 187 zonas arqueológicas, las cuales permanecen abiertas al público todo el año, y es en éstas áreas donde se han realizado decenas de hallazgos importantes para la arqueología mexicana.
Y es que bajo la tierra se esconden enigmas fascinantes sobre nuestras culturas ancestrales, que al salir a la luz nos hacen entender cada vez más nuestro origen.
Los frecuentes hallazgos del INAH han abierto caminos para replantear diversos aspectos de nuestro pasado, pero también de nuestra realidad. Es por eso que en De10.mx recopilamos algunos de los descubrimientos que seguro querrás conocer ¡Echa un vistazo!
1. Naia, el eslabón perdido
Se trata del esqueleto más antiguo del continente. Tiene entre 12 mil y 13 mil años de antigüedad y sus restos fueron hallados en 2014, en el Cenote de Hoyo Negro, una cueva subacuática cercana a Tulum, Quintana Roo. El esqueleto según los informes del INAH, pertenencia a una niña de 15 años que murió ahogada en este pozo natural mientras buscaba agua. Los estudios de ADN la colocan como el eslabón que vincula a los primeros pobladores de América con los grupos indígenas contemporáneos.
2. Inframundo en Teotihuacán
En 2014, justo debajo del Templo de la Serpiente Emplumada, se descubrió un túnel que lleva a un mítico pasaje que se cree simulaba el inframundo para nuestros ancestros. Se encontraron cerca de 70 mil objetos, desde bastones de mando hasta ofrendas, semillas y esqueletos de animales.
3. Dios del Fuego
A inicios del 2013, en la cima de la Pirámide del Sol, en Teotihuacán, investigadores del INAH encontraron una representación de Huehuetéotl, dios del fuego o dios viejo, que junto con dos estelas completas de piedra verde y una más incompleta, debieron funcionar como ornamento del templo que culminaba la edificación.
4. Camino de agua de Pakal
Luego de descubrir algunas “anomalías” debajo del Templo de las Inscripciones, el año pasado se informó que debajo de la tumba de Pakal, uno de los gobernantes más importantes de la ciudad maya de Palenque, se encuentra un manantial del que parte un sistema de canales que arriban hasta nueve cuerpos de agua distintos, distribuidos por todo el territorio que ocupa la ciudad.
5. Entierro de perros prehispánicos
En 2014, en la delegación Azcapotzalco, fueron hallados 12 esqueletos de perros que habrían sido enterrados entre los años 1350 y 1520. La profundidas de la sepultura era de aproximadamente 1.70 metros. Entre las razas de los caninos hay techichi y xoloitzcuintli.
6. Chactún, la ciudad perdida
A mediados del 2013 investigadores del INAH descubrieron los vestigios de una ciudad a la que denominaron Chactún (Piedra Roja o Piedra Grande), al norte de la Reserva de la Biósfera de Calakmul, en Campeche, y que data de los años 600 a 900 dC.
7. Ciudad Grande, la urbe maya tragada por la selva
En 2014 fue hallado “El Paredón”, un muro revestido con piedras cuadrangulares cubiertas en su totalidad por enormes lianas selváticas que había sido tragado por la jungla. La ciudad Noh Kah posee una extensión de 34 hectáreas, y pertenece a la ribera del río Hondo colindante con Belice.
8. Canchas de Juego de pelota
En 2014, mientras se construía una cancha de basquetbol en la Universidad Tecnológica del Poniente, en Yucatán, los trabajadores encontraron los restos de una cancha de Juego de Pelota maya. Con ésta suman 26 canchas para este juego ritual halladas en la entidad.
9. Mamut mexiquense
Se halló por casualidad en el municipio de Tultepec, mientras un grupo de trabajadores introducía el drenaje en la localidad de San Antonio Xahuento. La osamenta tiene unos 13 mil años de antigüedad. Se recuperaron más de 10 costillas, húmeros, un fémur, escápulas, cúbitos, radios, así como una decena de vértebras. Posiblemente el animal sufrió el mismo destino que otros de su especie: se quedaban atascados en el fango por su gran peso y finalmente eran destazados por el hombre y otros depredadores.
10. La reina roja
Su hallazgo no es tan reciente, pero causó furor entre los arqueólogos, luego que en 1994, en el Templo XIII de Palenque, se halló un pasillo que llevaba a tres recámaras, en una de ellas estaba la tumba de la Reina Roja, llamada así por la tonalidad rojiza del esqueleto, el cual fue provocado por el sulfuro de mercurio, un químico que permitió conservar el material biológico y la integridad genética del ADN. Hoy se sabe que fue esposa de K’inich Janahb Pakal, gobernante de la zona. En la tumba también se hallaron los esqueletos de una mujer y un niño.
Fotos: Especiales
Fuente: De10