Visitan ciudadanos a sus muertos. Como cada 1 y 2 de noviembre las personas visitan los panteones de la capital para recordar a sus seres queridos que ya murieron, llevan consigo flores, comida y objetos personales para honrar la memoria en esta tradición tan mexicana.
Como cada año y conforme a una tradición milenaria, los ciudadanos acuden a los panteones para visitar a sus familiares que ya se adelantaron para recordarlos y sentirlos cerca una vez más.
Desde temprana hora con flores de cempasúchil en las manos, veladoras, papel picado, objetos personales y comida las personas se dan cita en los 8 panteones municipales de Querétaro para pasar un rato con sus familiares que en estas fechas según la tradición regresan al mundo de los vivos para visitarlos.
En el panteón Cimatario la festividad comenzó con la celebración de la misa para pedir por las almas de los muertos, el 1 por los angelitos y todos los santos y el 2 por los fieles difuntos.
Las tumbas fueron adornadas con las flores favoritas del muerto, pero además con la tradicional flor de cempasúchil y la de terciopelo que con sus colores dan vida a las tumbas.
Algunas personas montaron ofrendas en las tumbas de sus familiares y otros más los recordaron con música norteña y tríos que cada año llenan de ritmo también los panteones.
RR Noticias realizó un sondeo para conocer la forma en que las personas recuerdan a sus familiares, principalmente llevando flores y estando un rato en las tumbas.
“A mi papá, pues ahora sí que se siente, uno vuelve a recordar todo”.
“Si vengo a ver a mi cuñada la más chica, cada año venimos siento tristeza por qué es un familiar muy allegado dentro de la familia, entonces si se siente triste uno en este mes del Día de los Muertos”.
“Traigo unas flores de campo que le gustaba mucho a mi cuñada Carmelita Solano y traemos otras flores que más le fascinaba”.
“A mis papás y vengo cada 15 días, pero cada año este día, siento alegría por venir de cierto modo a visitarlos, pero siempre venimos”.
Adultos, jóvenes y niños mantienen viva esta tradición que lejos de ser triste, es un momento de alegría al recordar los bellos momentos que se tuvieron con los seres queridos que sólo se adelantaron en el camino.
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Para RR Noticias, Juanita Gavidia
