Se restableció el servicio de agua en el municipio de Corregidora tras los tandeos ocasionados por el desfogue de la Presa de Zimapán. No obstante, la comunidad de Bravo resultó de las más afectadas, por lo que se prevé la construcción de nueva infraestructura hídrica en la zona norte, con una inversión estimada de 32 millones de pesos, informó el alcalde Chepe Guerrero.
El alcalde explicó que la obra fue autorizada por el gobernador Mauricio Kuri y contempla la perforación de un pozo, así como la modernización de la infraestructura en San Rafael. Precisó que los trabajos podrían iniciar este mismo año, en cuanto la Comisión Estatal de Aguas (CEA) dé luz verde al proyecto.
Guerrero añadió que la obra beneficiará a comunidades de la cabecera norte como Charco Blanco, Bravo y Purísima de San Rafael, donde ya se habían presentado fallas en el suministro antes del tandeo.
Señaló que ante las recientes afectaciones se ha apoyado a las familias con pipas de agua, especialmente en las comunidades que resultaron con mayores problemas.
Mar Hernández Mendoza.