“¡Los esfuerzos dan frutos!”, reza la fase que por años se ha transmitido bajo la idea del trabajo diario. Sin embargo, no siempre se ven los frutos. Así le pasó a un padre de familia, quien rompió en llanto al ver que a pesar de estudiar un año con su hijo matemáticas, éste no aprobó la materia y obtuvo muy baja calificación.
Y es que de acuerdo con los medios locales, el padre estuvo dándole clases particulares durante un año a su hijo. Sin embargo, cuando se realizó si examen final resulto que obtuvo seis de 100 puntos.
Como era de esperarse, la situación lo hizo que se sintiera frustrado, tenso y deprimido, pues parece que no valió la pena que se quedara hasta tarde dándole clases.
“Es realmente un poco triste. Ya no me importa. Mis esfuerzos son en vano, ¡que se las arregle por sí mismo!”, dijo el padre.
-Milenio
