El vicario general de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, señaló que, al permanecer con el mismo aforo durante el escenario B, las iglesias continúan con menos del 50 por ciento de su capacidad durante las celebraciones.
Si bien, las autoridades sanitarias recomiendan el uso de un medidor se dióxido de carbono, Martín Lara aclaró que en la mayoría de los templos no es necesario.
Lo anterior gracias a la altura y ventilación con la que cuentan, sin embargo, señaló que las parroquias que no tienen una construcción amplia sí buscarán obtener el medidor.
«El aforo es el mismo, los protocolos son los mismos, la única novedad es la sugerencia de utilizar un medidor de oxígeno, sin embargo, platicando con elementos de Protección Civil nos comentaban que en la mayoría de las iglesias no son necesarios, ya que tienen bastante altura y casi todas están previstas con corrientes cruzadas de aire».
El también vocero de la Iglesia Católica queretana detalló que continúa la postergación de celebraciones de bodas y XV años, en su mayoría para el mes de octubre.
En ese sentido, añadió que los sacerdotes están en toda disposición de realizar los cambios que se requieran para dichas celebraciones.
Agustín Murillo
