En el marco del foro “Implicaciones de la Ley de Seguridad Interior y las directrices que en materia de Derechos Humanos se siguen por parte de las Fuerzas Armadas de nuestro país” organizado por la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), el director general de Derechos Humanos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), José Carlos Beltrán Benítez ahondó en algunos aspectos de dicha ley.
Tras manifestar su respeto a las críticas y opiniones en contra de la legislación, comentó que la ley no está dirigida a las Fuerzas Armadas, ni es el pasaporte para poder entrar a las casas o posesionarse de bienes, aclaró que se trata de una ley con un sentido estricto de coordinación entre autoridades de los tres niveles de gobierno para atender temas de distinta índole en materia de seguridad.
«A diferencia de lo que se afirma, no es una ley para las fuerzas armadas, no es una ley para el ejército, no es un pasaporte para poder entrar a las casas y romper puertas y sacar gente y asegurar, y posesionarnos de bienes, de posesionarnos de cosas porque nos da facultad la ley; no, eso no da la ley, la ley tiene un sentido estricto de coordinación, porque no es exclusivamente para nosotros, esta ley es una ley dirigida a las autoridades locales, a las autoridades municipales y a las autoridades federales», apuntó.
Refirió que la ley cuenta con 34 artículos, que en su mayoría sustentan el respeto a los derechos humanos, y remarcan que todas las autoridades deben actuar en estricta restricción a sus facultades, atribuciones y competencias.
El general José Carlos Beltrán, destacó que tras la implementación de un programa de derechos humanos para las Fuerzas Armadas, las recomendaciones por presuntas violaciones a los derechos humanos han disminuido en un 84 por ciento en el actual sexenio, pasando de 98 entre recomendaciones entre 2006 y 2012 a 15 del 2012 al 2018.
Por: Iraí Silva
