La muerte del Papa Francisco el pasado lunes 21 de abril, desencadenó una serie de cambios para la santa sede en el Vaticano, así como a la Iglesia católica, pues tendrá que llevarse a cabo el cónclave para elegir a su sucesor.
El cónclave es una importante reunión que se realiza cuando el Papa muere, con la intención de elegir al nuevo Pontífice.
El proceso se realizará el 7 de mayo en la Capilla Sixtina, de acuerdo con el portavoz vaticano, Matteo Bruni, tras el acuerdo que alcanzaron los cardenales en la quinta congregación general.
Al menos 135 cardenales menores de 80 años se reunirán en los próximos días en la Capilla Sixtina, para iniciar una votación a puerta cerrada y saber quién será el próximo Papa.
Sin embargo, durante el cónclave, que tentativamente se realiza entre 15 a 20 días después del fallecimiento de un Pontífice, los cardenales queman las papeletas en una estufa especial instalada en la Capilla Sixtina.
¿Cuál es el significado del humo negro y humo blanco?
Los cardenales que participan en la votación del nuevo Papa, se dedican a quemar la papeleta y si el color del humo que salga por la chimenea de la Capilla Sixtina es negro, quiere decir que el cónclave tiene que seguir por horas, incluso días hasta llegar a un acuerdo.
Sin embargo, en caso de que el humo sea blanco, entonces es la señal mundial de que ya hay Pontífice al frente de la iglesia católica.
De acuerdo con la información, en el pasado se usaba leña o paja para intensificar el humo y evitar confusiones, pero ahora se emplean químicos.
Cuando sea seleccionado el Pontífice, entonces se emite la frase “Habemus papam” o “Tenemos Papa”, anuncio en latín con la que el cardenal protodiácono informa que hay un cardenal seleccionado.
Poco después el nuevo Papa soberano será llevado a la sacristía de la Capilla Sixtina, la cual se la ‘sala de las lágrimas’, y se entregarán al menos tres trajes pontificios de diversos tamaños, ya que no se sabe, quién sería elegido, y se anunciará la elección al mundo.
¿Cómo se hará el cónclave?
De acuerdo con datos del proceso del cónclave, tres cardenales serán los encargados de escrutar el proceso y tres de revisarlo.
Las papeletas serán rectangulares y en ellas se leerá “Eligo in Summum Pontificem”, mientras que en la parte inferior habrá un espacio para escribir el nombre del elegido.
Luego, cada purpurado llevará su papeleta hasta la urna y, ante los escrutadores, pronunciará él juramento:
“Pongo por testigo a Cristo Señor, el cual me juzgará, de que doy mi voto a quien en presencia de Dios, creo que debe ser elegido”.
Después se colocará la papeleta en un plato y con éste la deslizará en la urna.
Con información de Milenio.