Luego de que el exsubsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, revelara en un artículo publicado en El Universal que está siendo investigado en el fuero militar por encabezar las investigación Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa (Covaj), el presidente Andrés Manuel López Obrador respondió que Encinas también debe contribuir con la verdad.
“Fue testigo y además, todos tenemos que contribuir a hablar con la verdad y no hay ningún problema. No debe de haber protección para nadie, menos en estos casos, y hay que hablar sobre lo que se hizo porque si se cometieron errores, también hay que decirlo, pero este no pasa nada, nada absolutamente. Ojalá y todos participen.”
El presidente Andrés Manuel López Obrador mantuvo su defensa del Ejército en el caso Ayotzinapa y volvió a arremeter contra las organizaciones de derechos humanos que defienden a las familias de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos.
Argumentó en su defensa que colaboran con organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para promover la versión de que los militares estuvieron involucrados en la desaparición de los normalistas.
Obrador recordó que las organizaciones como Tlachinollan y el Centro de Derechos Humanos “Miguel Agustín Pro Juárez” (Centro Prodh) firmaron acuerdos con el gobierno de Enrique Peña Nieto para promover la llegada de expertos internacionales para coadyuvar en las investigaciones.
A pesar de que las familias de los 43 siempre avalaron a los integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), López Obrador cuestionó que los padres de los estudiantes desaparecidos estuvieran enterados de ello.
“Para que vinieran expertos internacionales, hicieron esos acuerdos y no sé si en su momento informaron a los padres,” comentó.
Negativa de Obrador hacía investigación
Andrés Manuel López Obrador criticó el seguimiento que ha dado al caso la periodista Anabel Hernández, ya que, dijo, ha hecho críticas a su gobierno y ha señalado la complicidad de diferentes actores en la desaparición de los estudiantes, derivado de que tiene relación con la DEA.
También, descalificó a Emilio Álvarez Icaza, ex secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a quien calificó como un “falsario” y uno de sus principales adversarios políticos, insinuando que su posición y la de la CIDH han influido negativamente en la narrativa sobre el caso.
Insinuó que la cobertura mediática y las narrativas promovidas por “ciertos periodistas” y organismos de derechos humanos pueden estar influenciadas por intereses políticos.
Subrayó que algunos detenidos relacionados con el caso fueron liberados bajo el argumento de haber sido torturados y enfatizó que no todos los casos de tortura se han demostrado.
“Cuando los dejan libres por la supuesta tortura, estos organismos de derechos humanos celebraron la resolución del juez,” declaró.
Añadió que esto ha complicado las investigaciones y desviado la atención hacia el Ejército, mientras que las autoridades locales de Guerrero, incluidos los responsables en Iguala, han quedado en un segundo plano.
«Ya todo es ‘fue el Ejército’, eso es lo que nos genera desconfianza.»
Aseguró que se ha desestimado la responsabilidad de otras autoridades locales, como el presidente municipal de Iguala, José Luis Abarca, quien enfrenta cargos por delitos distintos a la desaparición de los jóvenes.
“Ya no está acusado por la desaparición de los jóvenes, está acusado por otros delitos,” aclaró.
Presidente defiende al Ejército
El presidente defendió al Ejército Mexicano, enfatizando que es una institución que proviene del pueblo y no de la oligarquía.
Argumentó que los errores cometidos por los militares han sido por órdenes de autoridades civiles y destacó que de los 17 militares detenidos, “no se les ha probado” su implicación en la desaparición de los estudiantes, sino que se encuentran bajo custodia por omisión y posible vinculación con la delincuencia organizada.
López Obrador reiteró que no otorgará impunidad a nadie y apuntó que, de demostrarse la participación de soldados en la desaparición de los jóvenes, estos deben ser castigados.
“No estoy aquí para encubrir a nadie; si se demuestran culpabilidades, tienen que ser castigados,” aseguró.
López Obrador hizo un llamado a quienes “ven la mañanera en el reclusorio, en los reclusorios”a que si tienen conocimiento de dónde pueden estar los estudiantes normalistas “ayuden”.
“Nosotros les vamos a dar protección, garantías, los vamos a recompensar porque nos importan mucho”, y reiteró que la prioridad de su gobierno es localizar a los 43 jóvenes desaparecidos, ya que sin ellos, dijo que “no podemos sostener una versión“.