El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) ha señalado que los recursos públicos destinados a la educación son insuficientes para cubrir las necesidades del sector. Según las estadísticas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el gasto funcional del gobierno en educación experimentó en mayo su mayor caída registrada para este mes, con una disminución anual del 22%.
En mayo, la administración actual gastó 80,531 millones de pesos en educación, lo que representa una reducción significativa respecto al mismo mes del año anterior. Esta caída es la más pronunciada desde 2007, año en que Hacienda comenzó a reportar estos datos. La disminución más cercana ocurrió en mayo de 2017, durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, con una caída del 20% anual.
A pesar de esta caída, el gasto acumulado de enero a mayo sumó 418,324 millones de pesos, un 14.3% más en comparación anual. Sin embargo, el gasto en educación en México ha sido históricamente bajo. Al cierre de 2023, representó apenas el 2.9% del Producto Interno Bruto (PIB), superado por el gasto en combustibles y energía (3.7% del PIB) y protección social (5.4% del PIB).
El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) subrayó la importancia del financiamiento público para la educación, especialmente para los estudiantes con condiciones socioeconómicas más bajas. En 2020, el promedio de gasto educativo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) fue del 4.9% del PIB, mientras que en México fue del 4.5%.
Para 2024, se aprobó un presupuesto de 995,409 millones de pesos para educación, un aumento del 2.9% respecto al año anterior, representando el 11% del presupuesto público total. No obstante, el IMCO considera que estos recursos siguen siendo insuficientes para atender las necesidades educativas del país.
El CIEP también indicó que un financiamiento adecuado es crucial para la enseñanza y que es necesario invertir de forma más equitativa y eficiente. A pesar de las reformas educativas implementadas, la asignación presupuestaria sigue siendo insuficiente para enfrentar los desafíos del sector.
Diversas organizaciones y comisiones han abogado por una reforma fiscal progresiva que aumente los ingresos públicos y permita solventar las necesidades de gasto, incluyendo la educación.
Información de la mano con El Economista