Una mujer saltó al río San Joaquín para sacar a su hija de 11 años quien había caído por accidente, y consiguió salvar su vida a costa de perder la propia.
El cadáver de Brenda Durán, de 30 años, fue recuperado el sábado 11 de mayo tras cuatro días de búsqueda, pues ella se lanzó al agua el martes 7 del mismo mes.
La buena noticia es que tanto la niña de 11 años como su hermano mayor de 14 sobrevivieron al accidente.
«Me di cuenta de que mi hermana se había caído, entonces salté al río y nadé hasta la mitad. Tomé a mi hermana y salimos del agua, pero luego busqué a mi mamá y noté que ya estaba sumergida», relató Jaime Aguilar, el hijo. al medio CBS.
La familia buscó el cuerpo de la mujer con ayuda de las autoridades locales sin éxito durante dos días, hasta que optaron por contratar buzos profesionales que completaron la tarea en apenas seis horas.
«Le pregunté al buzo cuánto le debíamos y me respondió que sería gratis», comentó Aurora Durán, una familiar que buscó con ayuda de sonares y drones sin éxito, al medio Fox 6.
El equipo de rescatistas submarinos recibió como ‘pago’ la satisfacción de haber regresado el cuerpo con sus seres queridos, como ya habían hecho en otros accidentes similares.
El cadáver se encontró a unos 100 metros del lugar en el que se zambulló para sacar a su hija. El siguiente paso es velar a la mujer y buscar un nuevo hogar para los niños entre sus familiares.
Los parientes de la víctima se mostraron sorprendidos por su muerte, ya que en vida fue conocida por sus habilidades de natación. La investigación apunta a que una fuerte corriente submarina atrapó a la madre de dos.
Con información de Milenio.