Un servicio religioso marca la llegada del féretro de la reina Isabel II al Parlamento británico, donde se instala esta tarde la capilla ardiente, que permanecerá abierta hasta el funeral de Estado, el 19 de septiembre.
La misa está a cargo del arzobispo de Canterbury, Justin Welby, después de que el féretro, cubierto con el estandarte real y la corona imperial, fuera trasladado desde el palacio de Buckingham, en una solemne procesión y en presencia de miles de personas.
Se espera que decenas de miles de personas visiten la capilla ardiente en Westminster Hall, que abrirá hoy a las 17:00 h local y cerrará a las 06:30 h local el próximo lunes, cuando el féretro será trasladado a la vecina abadía de Westminster para el funeral.