El pasado primero de julio entró en vigor el nuevo Tratado de Libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC), el cual sustituyó al viejo NAFTA, más allá de la reducción de aranceles para los productos de importación entre los tres países, el nuevo acuerdo comercial contempla disposiciones en materia de valor agregado regional, derechos laborales y derechos ecológicos, además de medidas anticorrupción.
En este sentido, RR Noticias platicó con representantes del sector automotriz, analistas de la industria 4.0, y de la industria de la construcción, quienes vertieron sus opiniones sobre los alcances y las limitaciones del T-MEC para nuestro estado.
AUTOPARTES
La entrada en vigor del T-MEC, fue como una bocanada de aire fresco para la industria automotriz, después de la crisis desatada por la contingencia sanitaria del covid-19, pues de esto aumentará el valor agregado de autopartes fabricadas en Querétaro, lo que a su vez incrementará la cadena de valor en el armado de los automotores que se exportan de México hacia Estados Unidos y Canadá, con componentes producidos 100% en el Estado de Querétaro, consideró, el presidente del Clúster Automotriz de Querétaro, Renato Villaseñor Mendoza.
Pese a la crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus y pese a que Querétaro no tiene una armadora automotriz como tal, el estado tiene amplia disposición para ingresar un alto valor agregado regional, enfocado en la hechura de autopartes.
Puesto que aquí se fabrican componentes y sistemas completos esenciales como motores, partes de chasis o cuerpos del auto, cajas de transmisión, ejes, suspensiones, sistemas de dirección y baterías, llantas y componentes eléctricos, de la más alta calidad.
Con más de 300 empresas conformantes en esta industria, Querétaro está preparado para afrontar los retos del T-MEC, entre ellos el aportar mayor valor agregado regional a las autopartes que se venden a Estados Unidos y Canadá, las cuales podrían ser mayormente competitivas en costos, y con ello se puedan reducir aranceles al momento de la exportación, pues cerca del 80% de la producción de autopartes en el estado es para la venta a países de Norteamérica.
Por esta situación, el T-MEC contempla mantener en tasa cero los aranceles, si el automóvil o camión posee en su contenido un 75 por ciento de manufacturas producidas en México, lo que elevará aún más la competitividad del sector autopartista en la entidad queretana.
«Y de manera puntual, las autopartes denominadas como esenciales pues tienen un plan de incremento a nivel de contenido regional del 66 hasta el 75 por ciento para el 2023», consideró Renato Villaseñor Mendoza.
De igual forma indicó que la rama industrial de las autopartes en Querétaro, aporta el 30% del valor de la producción del sector manufacturero en la entidad, esto lo consideró el presidente del Clúster Automotriz de Querétaro.
«La aportación del sector de las autopartes, del sector de equipo de transporte, digamos que es la rebanada más grande que hay de aportación al PIB manufacturero (estatal) con cerca del 30%, entonces lo que se espera es que sigamos con esa tendencia de crecimiento, y que podamos seguir atrayendo inversiones al estado», aseguró Villaseñor Mendoza.
CONSTRUCTORES
Para los constructores queretanos, existen dudas sobre los beneficios palpables del T-MEC, a consecuencia de la incertidumbre en el panorama económico nacional, y cuyos paliativos a la crisis no se ven plasmados de manera certera en el nuevo acuerdo comercial.
En tanto se resuelve esta situación, los precios de algunos elementos como el acero y el cemento tenderán a incrementarse al menos 5 por ciento a nivel general, sobre todo porque se tienen que importar en su mayoría de otras partes del mundo, señaló el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Querétaro, Álvaro Ugalde Ríos.
Siendo el acero; entre varillas para construir las diversas edificaciones a base de concreto, y los perfiles para el levantamiento de puentes que puedan sostener las estructuras de los edificios, cuya dotación no puede abastecer al 100 por ciento el mercado nacional, e incluso, no sólo son traídos de la región de Norteamérica, sino también son comprados en regiones como Europa y Asia, a sobrepedido cuyo traslado remoto, también encarece su costo final, y por consiguiente el de las obras tanto públicas como privadas.
«Principalmente es el cemento y el acero, el que se vuelve siempre más inestable es el acero, porque el acero ahí en términos generales dos presentaciones, uno es la varilla, que también le llamamos acero, que esa se mete al concreto reforzado, y otros son los perfiles de acero que se mete en la estructura de acero”, precisó Ugalde Ríos.
Además, dijo que al mantenerse los precios en dólares de este tipo de insumos, es que existe variabilidad e inestabilidad en el precio del acero, lo incrementa muchas veces su costo fina y el de las obras de construcción.
De acuerdo con Ugalde Ríos, la mayor parte de estos insumos e implementos son importados de Estados Unidos, por tanto, se espera un incremento en el costo de los aranceles de estos productos para la construcción, debido a que en México no se producen en las existencias requeridas para cubrir las necesidades de la obra pública en las distintas ciudades dónde éstas se ejecutan.
En algunos casos, dijo que ante la falta de disponibilidad a granel de los materiales, los insumos tienden a ser subastados por las empresas de materiales para la construcción, puesto que el material escasea y no hay en abundancia suficiente para surtir a todas las obras, lo que incrementa su costo y por ende muchas veces ya no puede ser adquirido por las empresas constructoras, lo que retrasa significativamente la realización de las obras.
“En términos generales hay más aceros, pero eso es lo más usual, y ese viene de todos lados, de Europa, de España, de Arabia. Y luego como se piden perfiles y no hay en existencia, se traen de dónde se tenga», comentó.
A decir del presidente de la CMIC, en tanto se resuelven puntos como el que la región de Norteamérica surta de manera plena las necesidades de los constructores queretanos, y no se compren insumos de otras partes del mundo, especialmente de China, lo que llevaría a la penalización de las practicas comerciales mexicanas, se mantiene la lentitud en el arranque de obras de infraestructura pública como carreteras, puentes, hospitales, escuelas e infraestructura básica para colonias y comunidades, debido a la escasez de los insumos que se dejaron de producir por la pandemia, cuya proveeduría no resolverá por si solo el T-MEC.
E-COMMERCE
Las grandes empresas asentadas en nuestro estado, los pequeños negocios, los centros universitarios y de investigación, tienen una gran ventana de oportunidad ante la cláusula de cero cobros por derechos aduaneros a productos digitales exportados e importados en el marco de la entrada en vigor del T-MEC.
Puesto que las innovaciones se podrían enfocar en la creación de nuevos canales de venta de productos y servicios locales y regionales, mediante las plataformas de E-Commerce, es decir el comercio electrónico por internet, sentenció el analista Fabián Camacho Arredondo.
Para que lo anterior se cumpla, consideró, se deben de cumplir dos factores, uno el reto de la cobertura del internet a toda la población del estado, para empatarse con el servicio ofrecido a la población en Estados Unidos y Canadá, con el objeto de que la pequeña y mediana empresa, y los emprendedores así como también amas de casa y familias, puedan empezar a crear productos y servicios hechos con su talento y creatividad y después ofrecerlo en las plataformas de internet y aplicaciones electrónicas para celulares.
El segundo reto, que las universidades y centros de investigación deberán enfocar sus baterías a preparar y capacitar a los usuarios de este tipo de plataformas digitales, para que éstos cuenten con la habilidad y el conocimiento para usar este tipo de tecnologías que todavía están un poco lejos del alcance de sectores pauperizados de la población, y que también tienen necesidad de acortar la brecha digital para poder ofrecer algo en el mercado.
«Hoy en día estamos cuando menos como país trabajando en un desarrollo fuerte a nivel de universidades y centros tecnológicos, para cada vez tener profesionales más capacitados y adecuados para desarrollar otro tipo de tecnologías, lo cierto es que aun con todo esto hay grandes áreas de oportunidad para los cuales todavía avanzar, sobre ello, hay que reconocer que todavía siguen siendo más los productos tecnológicos que entran, que los productos tecnológicos con marca mexicana que salen hacia otras partes del mundo”, consideró el analista Fabián Camacho Arredondo.
Por otro lado, explicó que se debe empezar a identificar cuáles son los productos y servicios que el estado podría ofrecer con calidad y a precios competitivos, para que éstos sean atractivos en los mercados estadounidense y canadiense, en donde la búsqueda incesante de la innovación y la diversidad puedan permear en los artículos y bienes producidos.
Sobre todo, precisó que los centros de educación superior y centros de investigación deben de empezar a formar talento humano para la creación de nuevas plataformas tecnológicas nacionales y regionales, que puedan competir con las plataformas comerciales como Ebay, Amazon, Mercado Libre, para poder poner al alcance transnacional productos no sólo típicos de la región, sino ya otro tipo de bienes servicios y artículos con calidad 100% nacional.
“Entonces, la balanza comercial en ese sentido sigue siendo desfavorable, por lo cual es importantísimo que se sigan fortaleciendo los ejercicios de educación, desarrollo tecnológico, de generación de patentes para poder equilibrar esa balanza comercial», finalizó.
-Víctor González