El diputado local Antonio Zapata refirió que la función para multar de los agentes de movilidad en Querétaro, ya se contemplaba en la ley, sin embargo, la falta de recursos no había permitido su implementación.
Tras la aprobación en el ayuntamiento de Querétaro para facultar a los agentes de movilidad de multar a automovilistas, ciclistas y peatones; Antonio Zapata Guerrero, presidente de la Mesa Directiva del Congreso Local, refirió que en la reforma al artículo 115 constitucional del año 2000, se confirió la función de tránsito a los municipios, sin embargo, la falta de recursos había impedido su implementación.
“Al pasar al ámbito municipal, lo que vino sucediendo es que los municipios no tenían la capacidad para tener personal suficiente para hacer la función de policía y la función de tránsito, entonces eso hizo que fueran desapareciendo de manera paulatina, por falta de recursos de muchos municipios, de los famosos tamarindos, en la actualidad, de manera importante, los municipios de Querétaro, Corregidora, y ahora El Marqués y San Juan del Río, tiene la capacidad económica suficiente para poder destinar recursos y tener personal para hacer la función de tránsito y la función de seguridad”, dijo.
Añadió que esta función se secundada en la ley local de tránsito, por lo que una vez aprobado y publicado el reglamento de tránsito, son completamente legales las sanciones a las que haya lugar, además impugnables.
Así mismo, el también presidente de la Comisión de Movilidad, confió en que, como lo refirió el presidente interino de Querétaro, Enrique Correa, estos agentes cuenten con la capacitación necesaria para cumplir con la doble función; ello en vías de mejorar la circulación y seguridad de los ciudadanos.
En otro orden de ideas, el diputado panista comentó sobre la propuesta del candidato presidencial Jaime Rodríguez “El Bronco”, sobre mocharle la mano a los políticos corruptos, e indicó que, si hay que acabar con la corrupción e impunidad, y exponer a todos aquellos quienes comentan estos actos, políticos o ciudadanos, sin embargo, ello en apego al respeto de los derechos humanos.
Por: Anna Ledezma
