Evangelina Elizondo fue muy clara en su última voluntad, no quería un ataúd ostentoso y quería ser cremada para después reposar en una Iglesia cercana a su hogar, según reveló su hija Georgina Moheno Elizondo.
“No quería un cajón elegante, quiso un cajón de madera súper sencillo, eso me lo pidió desde hace mucho y eso es lo que estamos haciendo por ella”
Tal y como lo pidió, la protagonista de películas como La intrusa y Tres balas pérdidas, fue velada en un sencillo ataúdde madera en color crudo, sin adornos o acabados, rodeada de flores blancas y sobre el ataúd los deudos y quienes los acompañaban, podían ver una fotografía de ella, en la que lucía guapa, joven y sonriente.
“Ella tenía hepatitis C desde hace mucho tiempo y se descompenso, estaba sufriendo mucho”, reveló Georgina como la causa de su muerte.
Su hija explicó que su madre estuvo muy lúcida hasta el final y pudieron platicar de muchos temas, a pesar de que en las últimas semanas estuvo confinada en su cama.
Coronas de la Asociación Nacional de Intérpretes (ANDI) y de la Asociación Nacional de Actores (ANDA) flaqueaban el ataúd de Evangelina, a pesar de que su salida de la última organización no se dio en las mejores condiciones y hasta fue acusada de desvío de recursos. En la funeraria pocos fueron los famosos que asistieron a su velorio, sólo Mario Casillas y Ernesto Gómez Cruz, quienes fueron grandes amigos de Elizondo.
Georgina señaló que este martes su mamá sería cremada alrededor de las 13 horas, lo que daría tiempo a que sus hermanas Jimena y Gloria para que llegaran, debido a que radican en el extranjero.