La Universidad Estatal de California (Cal State, en inglés) en Los Ángeles, Estados Unidos, recibió en donación aproximadamente 8 mil libros sobre la historia y arqueología de México. Esta donación, que comprende tres colecciones: Nicholson, Glass y Ruwet, reúne ediciones facsimilares de códices mesoamericanos y crónicas coloniales, además de publicaciones escritas desde el siglo XVI hasta el siglo XX por autores como Bernardino de Sahagún, Diego Durán, Francisco del Paso y Troncoso, Alfredo Chavero, Alfonso Caso, entre muchos otros.
Por ello, el 21 y 22 de abril en la Biblioteca John F. Kennedy de dicha institución, se exhibirán 114 de dichas joyas bibliográficas en la exposición Transcultural Dialogues: The Books of Mesoamerica and Colonial Mexico, en el marco del Simposio en homenaje a Eduardo Matos Moctezuma.
Este conjunto de colecciones, convierte a la Biblioteca John F. Kennedy de la Universidad Estatal de California, según la docta opinión de algunos investigadores y coleccionistas especializados en Mesoamérica, en uno de los mejores acervos de su tipo en el mundo, explica Manuel Aguilar-Moreno, profesor investigador y co-curador de la exposición junto con Azalea Camacho y Angelene Campuzano.
Sobre el simposio, añade, “cada dos años hacemos un simposio mesoamericano dedicado a algún académico destacado en esa área, tanto mexicano, como europeo o estadunidense. Hemos creado un premio que se llama Tlamatini, que significa ‘sabio’ en náhuatl y este año se lo otorgaremos al eminente arqueólogo mexicano Eduardo Matos Moctezuma, quien fue el fundador del Proyecto Templo Mayor”.
El también co-organizador del simposio, junto con la Art History Society de Cal State LA y Diana Magaloni, investigadora del Museo de Arte de Los Ángeles (LACMA), destaca que este encuentro consiste en la presentación de conferencias por especialistas internacionales en el área del homenajeado –este año dedicado a la cultura mexica–; sin embargo, la trayectoria de este simposio fue lo que motivó a los tres coleccionistas e investigadores estadunidenses a donar uno de los acervos más importantes para el estudio de códices mesoamericanos y del México colonial.
“De las colecciones mencionadas, la más antigua es la colección Nicholson que recibimos en 2010, luego nos llegó la colección Glass en 2014 y la última que acabamos de recibir es la Ruwet en 2016. Básicamente estamos hablando de colecciones que nos ofrecen todas las ediciones facsimilares que existen de los códices prehispánicos y de las crónicas coloniales históricas, además de libros de análisis y de interpretación de investigadores y etnohistoriadores ‘modernos’ de los últimos doscientos años”, indica Aguilar-Moreno.
Algunas de esas interpretaciones son de Alfredo Chavero, Francisco del Paso y Troncoso, José Fernando Ramírez, Joaquín García Icazbalceta, Antonio Peñafiel, Eduard Seler, Alfonso Caso, y Karl Nowotny, entre otros; es decir, “son estudios hechos por los primeros investigadores que empezaron a analizar los códices y los documentos coloniales”
Entre los ejemplares que aún se encuentran en proceso de catalogación, hay libros que pertenecieron a las bibliotecas particulares de personajes como el francés Désiré Charnay (1828-1915), famoso por explorar la zona maya de Comalcalco, en Tabasco, o del expedicionario alemán Teobert Maler que vivió en México de 1864 a 1912 para registrar el área maya de Campeche, Chiapas y Yucatán.
“Diría que tenemos, en cuanto a fuentes primarias, una de las colecciones facsimilares más grandes del mundo sobre códices mexicanos. También tenemos una colección grandísima, diría completa, de los cronistas del siglo XVI, tal como Hernán Cortés, Bernal Díaz del Castillo, Bernardino de Sahagún, y Toribio de Benavente “Motolinía”, entre otros, así mismo Juan de Torquemada y Francisco Javier Clavijero y demás cronistas del siglo XVII y XVIII”, asevera Aguilar-Moreno.
EL MEXICANO. Manuel Aguilar-Moreno, quien lleva 18 años trabajando en la Universidad Estatal de California y quien creó el área de historia del arte latinoamericano en dicha casa de estudios, señala que la exposición Transcultural Dialogues: TheBooks of Mesoamerica and Colonial Mexico, será un diálogo para entender qué es México y por ende, el mexicano.
“La llegada de los españoles con todo y lo traumático del evento, que destruyó de alguna manera toda una maravillosa civilización primaria como lo es el mundo precolombino, generó, a fin de cuentas el contacto y diálogo de dos culturas, que a través de un largo proceso de transculturación produjeron una nueva gente con una cultura propia: ‘los mexicanos’”, indica.
Por lo tanto, añade, en la muestra se exhibirán libros que reflejan la esencia de esa identidad sustentada por los componentes indígena y español.
La muestra, que constará de 114 libros que forman parte de los aproximadamente 8 mil ejemplares de las tres colecciones, iniciará con una selección de códices prehispánicos relevantes y después seguirá con libros coloniales y del México independiente.
“Por ejemplo, mostraremos el libro Homenaje a Cristóbal Colón, coordinado por Alfredo Chavero y Francisco del Paso y Troncoso, que fue la participación de México en la Exposición Universal en España en 1892, para recordar el cuarto centenario del “descubrimiento” de América. Esto nos muestra cómo ese hecho tan controvertido ahora, ha sido visto desde diferentes ángulos a lo largo de la historia”, explica.
Foto: Especial
Fuente: Crónica