La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, se reunió este jueves con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, para abordar la situación en Gaza.
Durante el encuentro, Harris dejó claro que no seguirá la estrategia de su predecesor, Joe Biden, de ejercer presión sobre Israel en privado. En cambio, Harris pidió a Netanyahu alcanzar un acuerdo de paz y expresó su firme postura de no permanecer en silencio ante el sufrimiento en Gaza.
Cambio en la política de EE.UU. hacia Gaza
Harris, quien lanzó su candidatura a la presidencia tras la retirada de Biden de la contienda electoral, insistió en la necesidad de poner fin a la «devastadora» guerra en Gaza.
«Lo que ha ocurrido en Gaza durante los últimos nueve meses es devastador, las imágenes de niños muertos y personas hambrientas y desesperadas que huyen en busca de seguridad, a veces desplazadas por segunda, tercera o cuarta vez», declaró Harris, subrayando que no se puede ignorar estas tragedias ni volverse insensibles al sufrimiento.
Reacciones y encuentros adicionales
Netanyahu, por su parte, agradeció a Biden por sus 50 años de apoyo a Israel, pero también mostró su disposición a trabajar con él en los próximos meses. Harris y Biden se reunieron con las familias de los rehenes estadounidenses en Gaza, quienes han solicitado un acuerdo de alto el fuego.
El viernes, Netanyahu se reunirá con el candidato republicano Donald Trump en Florida. Trump instó a Israel a «terminar» rápidamente la guerra en Gaza.
Contexto del conflicto
El ataque de Hamás del 7 de octubre resultó en la muerte de 1,197 personas en Israel y el secuestro de 251, de las cuales 111 siguen retenidas en Gaza. La ofensiva militar de Israel ha provocado la muerte de más de 39,100 palestinos, en su mayoría civiles, según datos del ministerio de Salud de Gaza.
Información de la mano con Excelsior
