Un detallado análisis realizado por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ha revelado una serie de preocupantes irregularidades en las cavernas que se encuentran bajo las obras del Tramo 5 Sur del Tren Maya. Entre los hallazgos destacan el derrame de cemento, la oxidación de pilotes, colapsos de techos y la extracción no autorizada de agua, entre otros problemas.
El informe fue presentado ante el Juzgado Primero de Distrito en Mérida, Yucatán, como parte de una demanda de amparo promovida por ciudadanos de Playa del Carmen, solicitando la suspensión de las obras en el Tramo 5 Sur. A pesar de una suspensión definitiva otorgada en enero pasado, el gobierno federal y las empresas subcontratadas continúan sin acatarla.
Además de los derrames de cemento, la Profepa también encontró evidencia de oxidación en los pilotes, colapsos de techos de cavernas, modificaciones en cuevas debido a la perforación para la instalación de pilares, extracción no autorizada de agua y relleno de cavernas sin nombre con material pétreo, entre otras violaciones a las condiciones ambientales establecidas en el resolutivo de impacto ambiental emitido por la Semarnat en 2022.
Patricia Godínez, representante de la organización Moce Yax Cuxtalt y del movimiento Sélvame del Tren, calificó el informe como «escalofriante» y afirmó que confirma las denuncias sobre los daños a las cavernas, cenotes y acuíferos. La falta de cumplimiento con la suspensión definitiva y la continuación de las obras están exacerbando el daño ambiental.
El juzgador, tras recibir el informe de la Profepa, emitió un acuerdo donde señala que los daños al medio ambiente podrían ser de difícil o imposible reparación, por lo que se mantiene la medida precautoria de suspensión de las obras. Se ordenó además una inspección judicial para verificar el desacato a la suspensión definitiva.
Información de la mano con El Universal
