El cantante Diego «el Cigala» afirmó que sería «como un sueño» grabar un dueto con el intérprete de música popular mexicana Vicente Fernández, el cual formaría parte del disco tributo a México que prepara desde hace unos meses.
«Con el maestro don Vicente Fernández, por supuesto, es como un sueño que tiene uno en la mente», dijo en una entrevista concedida durante su visita a Guadalajara, capital del occidental estado de Jalisco, como parte de una gira por México junto a la cantante cubana Omara Portuondo.
El cantaor español dijo que Fernández es un artista por el que siente «muchísima admiración y respeto» debido a su amplia trayectoria, por lo que desea conocerlo y concretar la grabación.
«Espero que si nos conocemos, que creo que va a ser así, pasemos un rato maravilloso», aseveró.
El Cigala dice ser un admirador de la música mexicana, por ello se aventuró a la creación de un disco llamado «Cigala canta a México«, en el que pretende ir «al encuentro de los grandes» cantantes y compositores de este país como Javier Solís, Chavela Vargas o Armando Manzanero.
La música latina tiene para Diego Ramón Jiménez, nombre real del Cigala, el mismo encanto que el flamenco, el ritmo que trae en la sangre y al que se dedica desde su adolescencia.
Es «como si en otra vida ya hubiera tenido una conexión» con la salsa, los boleros o las canciones rancheras, expresa.
El factor común de estos géneros, asegura, es que son «músicas de verdad», que surgieron «del alma», como una forma que la gente tenía para expresar sus amores o sus desventuras.
«Son músicas muy del corazón, que te llenan el alma, y cuando yo toco ahí es porque no dejo en ningún momento tampoco de ser flamenco; ahí está la gracia de esto», asegura el cantante.
Además de haber presentado en 2016 el disco y el documental «Indestructible», en los que hace homenaje a la música de salsa, el Cigala comparte escenario desde hace un año con la intérprete cubana Omara Portuondo, icono de la música de ese país, en un espectáculo que combina sones, boleros y danzones.
En el recital realizado en el teatro Diana de Guadalajara, ambos alternaron sus voces en una noche llena de bohemia con canciones como «Lágrimas negras», «Bésame mucho» y «20 años».
Entre risas, baile y alguna que otra broma, los intérpretes mostraron la buena relación que los une y que se ha fortalecido en esta gira, que los llevó a Europa y que están por concluir en México.
Además, los artistas tienen pensado realizar una presentación en Cuba, aunque aún no cuentan con una fecha cerrada.
Portuondo ha sido para el Cigala una «lección en la vida» tras la muerte de su esposa en 2015, lo que le ha traído «un aprendizaje continuo en el vivir», expresa.
«Para cantar como canta Omara tienes que tener esa edad que tiene ella. Es otra manera de cantar, otra manera de sentir, otra manera de llevar el tiempo. Y ahí es donde realmente me emociona», asegura.
El cariño que el cantaor le profesa a la cubana va más allá de los escenarios, como si se tratara de una amiga a la que conoce de toda la vida. Con ella ha creado la «química» que «solo la música puede lograr».
Y que, además, se puede percibir en otros detalles, como cuando antes de empezar la entrevista, el Cigala le pide a su asistente que lo acompañe para comprar «un vestido bonito», como «los que a ella le gustan», para dárselo de regalo a Portuondo, quien hoy cumple 87 años.
La cantante «es un milagro de la vida y de la música», concluye el artista.