El padre Wenceslao Ferrusquía Navarrete, presidió la misa dominical en la iglesia de Santa Rosa de Viterbo.
Durante la homilía, destacó las intenciones de benerar a Santísima Trinidad (Dios padre, Dios hijo y el Espíritu Santo), así como la celebración del Día del Padre.
Indicó que la importancia del don de la paternidad, para ser amorosos con sus hijos, protegerlos y educarlos.
«Traer un ser al mundo no es poca cosa, lo que es responsabilidad ser padre es providentes, amorosos, protectores, y sobre todo educadores», expresó.
Durante la homilía, reiteró que la mejor forma en la que las personas católicas pueden rendirle culto a Dios, es acudir a misa, ofrecer una ofrenda y comulgar.
Wenceslao Ferrusquía, también señaló que el desaire o deshonra más grande que se le puede hacer a Dios, es no acudir al templo y no comulgar.
Por: Luis Arturo Pérez.