El director de “Mi pobre angelito 2: perdido en Nueva York”, Chris Columbus, mostró su arrepentimiento por haber permitido un cameo de siete segundos del hoy presidente estadunidense Donald Trump en la película y afirmó que «desearía que desapareciera» esa escena del largometraje que estrenó en el año 1992.
En una entrevista en el ‘San Francisco Chronicle’, Columbus criticado las controvertidas políticas migratoria del líder republicano, afirmando con sarcasmo que si «cortara» la breve secuencia del mandatario junto al protagonista Kevin McCallister «probablemente» hoy le echarían del país y «debería» volver a Italia, país en el que tiene ascendencia familiar.
Trump y Columbus, señala el diario norteamericano, han protagonizado un cruce de acusaciones que se sigue arrastrando desde 2023.
Por aquel entonces, el actual presidente reprochó al director de la película haberle «rogado» de forma «persistente» su aparición en la escena rodada en el Hotel Plaza de Nueva York. Además, el magnate sostuvo que su breve intervención en el largometraje «ayudó a que la película fuera un éxito».
Por otro lado, Columbus ha confesado que «no hay mundo en el que le rogaría a un no-actor para estar en una película». En este sentido, treinta y tres años después, declaró que esta escena se ha convertido para él en una «maldición» que le «gustaría que no estuviera allí».
