Hay caminos rectos y asfaltados hacia la grandeza, y hay otros que parecen un campo minado, llenos de obstáculos, dudas y giros inesperados. Josh Allen conoce bien el segundo. Pasó de no recibir ninguna oferta universitaria en la preparatoria a ser el Jugador Más Valioso de la NFL en 2024.
En la noche de gala donde la liga reconoció a lo mejor de la temporada y que contó con la inconfundible conducción de Snoop Dogg, el quarterback de Bills subió al escenario con la misma determinación con la que juega: sin miedo, sin dudas, sin detenerse. Recibió el premio con 27 votos a primer lugar, cuatro más que Lamar Jackson, y se convirtió en el primer jugador de los Bills en ganar el MVP desde Thurman Thomas en 1991.
Para un equipo con una historia plagada de talento pero marcada por finales dolorosos, la coronación de Allen como el mejor jugador de la NFL, es un apapacho por la dolorosa derrota en la final de conferencia.
Allen cerró la temporada 2024 con 4,269 yardas totales, 41 touchdowns y la menor cantidad de pérdidas de balón de su carrera (8).
La ceremonia de los NFL Honors 2024 no sólo celebró a Allen y el resto de los ganadores, sino también a cuatro nuevos miembros del Salón de la Fama del Fútbol Americano: Jared Allen, Sterling Sharpe, Eric Allen y Antonio Gates.
clm
