Mosquitos genéticamente modificados con un esperma tóxico podrían convertirse en un arma contra las enfermedades tropicales, informaron científicos australianos en un estudio publicado el martes.
Su «técnica del macho tóxico» busca criar mosquitos cuyo esperma contiene proteínas venenosas que resultan mortales para las hembras después de copular.
La técnica apunta a las hembras porque son las que pican y chupan sangre, con lo cual propagan enfermedades como malaria y dengue.
El científico Sam Beach de la Universidad Macquarie, en Australia, comentó que el método «podría funcionar tan rápidamente como los pesticidas sin dañar a las especies beneficiosas».
Excelsior