La nueva dirigente estatal de Morena, Gisela Sánchez, advirtió que quienes no respeten los acuerdos internos del partido enfrentaran consecuencias, ante la posible expulsión del diputado Sinuhé Piedragil. Sánchez aseguró que todos los militantes tienen la obligación de cuidar el movimiento y defender el voto popular.
La dirigente enfatizó que Querétaro votó por Morena, y como tal, defenderá esa decisión de la ciudadanía. Aseguró que si no se respetan los acuerdos, se tomarán sanciones, aunque recalcó que su enfoque principal será el diálogo. Indicó que se reunirá con los demás diputados para abordar la situación de Piedragil y evaluar los próximos pasos dentro del partido.
Sánchez también destacó que el partido mantiene su compromiso con los ciudadanos de Querétaro y que, aunque se tomarán medidas disciplinarias si es necesario, el objetivo es preservar la unidad y el respeto mutuo dentro de la bancada.
Mar Hernández Mendoza.