Millones de estadounidenses en la mira de las campañas de Kamala Harris y Donald Trump reciben mensajes de texto insistentes, que anuncian que el futuro de la república está en juego y solicitan donaciones.
Con solo 7 dólares, dicen, pueden contribuir a la causa. Los textos son una forma económica y directa de llegar a votantes y donantes sin las restricciones de la publicidad tradicional, y ambas campañas los emplean intensamente.
“Todo el día, todos los días”, comentó Robyn Beyah, quien asiste a un mitin de Harris. Para ella, el constante bombardeo de mensajes es “inofensivo” y está dispuesta a soportarlo por su apoyo a Harris. Sin embargo, no todos los votantes opinan igual.
Ebenezer Eyasu, también presente en el evento, considera que los mensajes se han convertido en “ruido de fondo”. Otros simpatizantes de Harris, como Sarah Wiggins, prefieren métodos de persuasión más personales y eliminan los mensajes sin leerlos.
En el mitin de Trump en Tempe, Arizona, los partidarios expresaron su molestia con el bombardeo de mensajes. Morse Lawrence, de Mesa, Arizona, señaló que considera la estrategia efectiva, pero una molestia, mientras que Jennifer Warnke, de St. John’s, Arizona, afirmó que, aunque le incomodan, al menos siente que los republicanos ahora prestan atención a su apoyo.
La estrategia detrás de los mensajes
Ambas campañas emplean tácticas similares para captar la atención de los votantes: alertas apocalípticas, plazos urgentes y mensajes “personales” de figuras destacadas como Trump Jr., George Clooney o Nancy Pelosi.
En ocasiones, los mensajes incluyen ofertas de mercancía, como el sombrero MAGA dorado que Trump supuestamente ofrece firmar. En el caso de Harris, se solicitan donaciones sin regalos, pero el tono de urgencia persiste.
Mensajes cuestionables y estafas
A medida que se intensifica la campaña, también aumentan los mensajes engañosos y fraudulentos. La Liga de Mujeres Votantes de Wisconsin denunció recientemente que se enviaron mensajes intimidatorios a jóvenes, advirtiendo de multas y cárcel si votaban en un estado donde no eran elegibles.
Igualmente, en Pensilvania, algunos votantes recibieron mensajes falsos afirmando que ya habían votado. Los expertos aconsejan leer cuidadosamente la letra pequeña y verificar la legitimidad de los grupos de recaudación antes de donar.
Aceptación entre algunos votantes
Pese a las molestias, algunos votantes encuentran los mensajes útiles. Beverly Payne, voluntaria y votante de Harris en Georgia, dice que responde a cada uno de ellos, mencionando su entusiasmo por una campaña de Ben & Jerry’s inspirada en Harris. Para Payne, los mensajes son parte de la cultura actual y una herramienta clave en la recaudación de fondos de la candidata.