El primer minuto de mañana concluye el gobierno de Andrés Manuel López Obrador —el primer Presidente de la República emanado de un partido de izquierda—, un sexenio marcado por los mil 428 diálogos circulares conocidos como mañaneras, las cuales se convirtieron en el principal esquema de comunicación política y social del mandatario; los recorridos por el país para supervisar y concretar los proyectos insignia del sexenio, y las críticas al régimen neoliberal.
Durante su administración, López Obrador rompió los esquemas establecidos por los gobiernos del PRI y del PAN en cuanto a la forma de trabajo de un jefe del Ejecutivo y el acceso a su persona no sólo para los colaboradores, sino para el resto de la gente.
Entre sus principales logros, informados siempre desde su conferencia matutina, destacan el desmantelamiento del Estado Mayor Presidencial, prohibir la condonación de impuestos, la implementación de la austeridad republicana; el aumento del salario mínimo, la creación de la Guardia Nacional y los múltiples programas sociales.
Así como las megaobras emprendidas durante el sexenio, como el Tren Maya, el Corredor Interoceánico y la refinería de Dos Bocas.
Sin embargo, la confrontación con el Poder Judicial y la oposición también dejaron huella.
Los comicios del pasado 2 de junio reflejaron el apoyo de más de 36 millones de personas a López Obrador y a su movimiento, el cual tendrá continuidad con Claudia Sheinbaum
Pardo al frente.
Excelsior