El gobierno de Estados Unidos ha decidido reanudar el programa migratorio que permite la entrada de inmigrantes provenientes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, agregando medidas de «investigación adicional» para los patrocinadores financieros con sede en Estados Unidos, tras preocupaciones sobre posibles fraudes.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) suspendió el programa a principios de agosto para investigar estas inquietudes. Sin embargo, una auditoría interna no encontró evidencia de fraude generalizado entre los patrocinadores, aunque sí detectó algunos casos aislados, como el uso de números de Seguro Social falsos.
Para fortalecer la integridad del programa, se ha implementado un mayor escrutinio sobre los patrocinadores, incluyendo revisiones adicionales de antecedentes penales y registros financieros, así como la toma de huellas dactilares para identificar a patrocinadores fraudulentos o aquellos que presenten múltiples solicitudes.
A pesar de estas medidas, los republicanos han criticado la reanudación del programa, argumentando que no aborda adecuadamente el fraude y sigue siendo un medio para eludir las leyes migratorias.
Programa para inmigrantes
El programa, iniciado en enero de 2023, es clave en la política migratoria del presidente Joe Biden, ya que ofrece un camino de entrada legal a hasta 30,000 personas al mes de estos cuatro países durante dos años, permitiéndoles solicitar un permiso de trabajo. Los inmigrantes deben tener un patrocinador financiero en Estados Unidos y llegar por avión a un aeropuerto estadounidense.
Desde su implementación, más de 520,000 personas de estos países han llegado a Estados Unidos bajo este programa. A su vez, los arrestos por cruces ilegales en la frontera sur de inmigrantes de estos países han disminuido notablemente. Por ejemplo, los arrestos de cubanos cayeron de más de 42,000 en noviembre de 2022 a 5,065 en el primer semestre de 2024, mientras que los arrestos de haitianos pasaron de casi 18,000 en septiembre de 2021 a 304 en el mismo periodo de 2024.
El DHS destacó que los inmigrantes admitidos en el marco del programa han sido rigurosamente investigados y que no se encontraron problemas significativos durante su revisión. El programa continúa, con la colaboración de México, que se ha comprometido a readmitir a personas de estos cuatro países que crucen ilegalmente la frontera sur de Estados Unidos.
Información de la mano con APNEWS