El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, anunció este viernes su disposición a ofrecer asilo político a Nicolás Maduro como una solución temporal para facilitar su salida de Venezuela hacia un tercer país.
Este ofrecimiento se da a pesar de la reciente suspensión de las relaciones diplomáticas entre Panamá y Venezuela. Mulino aclaró que el asilo no implicaría que Maduro se quede en Panamá y podría extenderse a otros funcionarios venezolanos.
Mientras tanto, la líder opositora María Corina Machado propone una solución negociada para la transición del poder.
En respuesta a la reciente elección presidencial, Machado ofrece “salvoconductos” y garantías para facilitar una salida ordenada del régimen actual, a pesar de las acusaciones de fraude electoral. Según Machado, la oferta busca asegurar una transición democrática que incluya incentivos para las partes involucradas.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó a Maduro como ganador con el 52% de los votos, aunque la oposición, encabezada por Edmundo González Urrutia, sostiene que su candidato obtuvo el 67%.
Esta discrepancia ha generado protestas y violencia, con al menos 24 muertos y más de 2,200 detenidos, según informes de derechos humanos y del propio régimen.
Machado, quien lideró la oposición mayoritaria, aboga por un reconocimiento internacional de la victoria de González Urrutia y la implementación de una transición pacífica.
A pesar de la represión y la violencia, insiste en la necesidad de una solución negociada y asegura que la mayoría de los militares y cuerpos policiales también buscan un cambio hacia una Venezuela con justicia y libertad.
Información de la mano con El Economista
