Durante los Juegos Olímpicos de París 2024, la presencia de dos atletas embarazadas, la esgrimista egipcia Nada Hafez y la arquera azerbaiyana Yaylagul Ramazanova, no pasó desapercibida. Ambas competidoras enviaron un poderoso mensaje de fortaleza y determinación, a pesar de no llevarse medallas.
Nada Hafez, que estaba embarazada de siete meses, utilizó su participación para desafiar sus propios límites y servir de ejemplo para su futuro hijo.Aunque no ganó ninguna medalla, Hafez expresó que el evento le demostró su capacidad para superar obstáculos y ofreció un mensaje alentador a otras mujeres.
“No estás enferma, solo estás embarazada. Puedes hacer lo que quieras y eres realmente fuerte,”declaró a Reuters.
Por su parte, Yaylagul Ramazanova, quien fue eliminada en los octavos de final de tiro con arco, también encontró valor en su experiencia.
“Esto demuestra que las mujeres siempre pueden seguir sus objetivos, lo que les da fuerza,” afirmó.
Ambas atletas subrayaron que, a pesar de los desafíos y el miedo inicial, el apoyo médico y la determinación personal les ayudaron a continuar con sus sueños.
Hafez anticipa con entusiasmo el momento de regresar a casa y compartir sus vivencias con su hijo, convencida de que su pequeño estará orgulloso de su participación en los Juegos Olímpicos.
Información de la mano con El Economista