Mientras que la selección argentina varonil lidera el ranking de la FIFA y es la actual campeona del mundo tras imponerse en Qatar 2022 y ha traído importantes patrocinadores, su representativo femenil pasa por condiciones diferentes al grado de recibir únicamente como alimento “un sándwich y un plátano”.
Al inicio de la semana, tres jugadoras de la representación femenil del Boca Junior renunciaron al representativo nacional señalando que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) no les ofrece un trato adecuado.
Este movimiento hace recordar la salida de Estefanía Banini, jugadora del Atlético de Madrid y considerada la mejor futbolista argentina de todos los tiempos, que en su momento decidió ya no portar la playera aunque sin mencionar razones específicas.
“Cuestión de tiempo. Gracias por animarse a hablar”, escribió en la red social X la integrante del cuadro español.
La arquera Laurina Oliveros, la defensora Julieta Cruz y la mediocampista Lorena Benítez, quienes son titulares en el equipo de Germán Portanova, oficializaron su salida y no estarán en el duelo amistoso que la albiceleste tendrá ante Costa Rica.
“Llega un punto que cansan las injusticias, que cansa no ser valorada, no ser escuchada y peor aún ser humilladas”, expresó Cruz en su cuenta de Instagram. “Se necesitan mejoras en la selección argentina femenina de fútbol y no hablo solo desde lo económico, hablo de entrenar y tener un almuerzo, un desayuno”.
“Recibimos al finalizar el entrenamiento un sándwich de jamón y queso con una banana”, indicaron las jugadoras.
Las mismas denunciaron además que no cuentan con un gran apoyo económico por parte de la AFA quienes no darán viáticos a las seleccionadas luego de argumentar que el partido será en Buenos Aires, esto mientras a las familias de las jugadoras se les cobrará el acceso si desean ver el partido.
AFA no hizo comentarios ante la situación.