Debido a la declaratoria de Patrimonio de la Humanidad con la que cuenta el Centro Histórico, el Instituto Nacional de Antropología e Historia no ha dado los permisos necesarios para modificar espacios públicos en beneficio de personas con discapacidad, señaló la presidenta de la Organización Pan Que Ayuda, Ana Yolanda López.
Señaló que las organizaciones que velan por los derechos de las personas con discapacidad entienden la postura del INAH para proteger el patrimonio histórico y cultural del estado, aunque este tipo de acciones también vulneran los derechos de un sector de la población.
Apuntó que a nivel mundial ya se maneja un concepto conocido como «accesibilidad cultural», una acción afirmativa que permite flexibilidad en las políticas de preservación histórica a cambio de una mayor difusión y aprovechamiento de espacios a sectores vulnerables.
Yolanda López apuntó que este tipo de trabas no únicamente se han presentado para proyectos de accesibilidad en museos o recintos históricos, sino en la propia vía pública que, debido al uso de adoquín, genera muchos inconvenientes para usuarios en silla de ruedas, personas en muletas o de la tercera edad.
Destacó que organizaciones de la sociedad civil que apoyan políticas públicas para este sector buscarán tener más mesas de trabajo con autoridades culturales para presentar nuevos esquemas de inclusión en recintos históricos para personas con discapacidad.
Alan García.