Mientras Aaron Rodgers semana a semana se involucra en polémicas con los incendiarios comentarios que realiza durante sus participaciones en el programa de Pat McAfee, su exequipo, los Packers de Green Bay siguen demostrando que dejar atrás al estelar quarterback fue un movimiento hacia adelante.
Los Packers se encuentran a una victoria de regresar al Juego de Campeonato de la NFC y lo han hecho con una fórmula que no es típica para contender por el trofeo Vince Lombardi.
La organización dejó que Aaron Rodgers (40 años de edad) y otros notables veteranos se alejaran de Lambeau Field para apostar por una reconstrucción juvenil.
Sin Rodgers tomando los balones por debajo del centro, los Packers perdieron mucha experiencia en la posición más importante del juego, pero también ganaron el ímpetu que inyecta la sangre nueva.
Una gran cantidad de elementos millennials y de la Generación Z inundaron la plantilla de los Packers. Rodgers fue sustituido por Jordan Love, quien tiene 25 años, pero cuatro temporadas aguardando por su gran oportunidad que hasta ahora no ha desperdiciado. En su primera campaña como titular, Love completó el 64.2 por ciento de sus intentos de pase para 4,159 yardas, 32 touchdowns y 11 intercepciones esta temporada.
El cúmulo de energía y la inocencia propia de la inexperiencia, se conjugaron para lograr que un equipo que tuvo récord de 2-5 en algún punto de la campaña, se recuperara para terminar el año con marca de 10-8 y un puesto de playoffs.
El pasado fin de semana, los Packers se convirtieron en el equipo más joven desde la fusión AFL-NFL de 1970 en ganar un partido de playoffs.
La edad promedio de los jugadores de Green Bay de 25,58 años, lo convirtió en el cuarto equipo de menor edad en ingresar a la postemporada, detrás de los Bengals de 1970 (25,22), los Dolphins de 1970 (25,44) y los Bills de 1974 (25,56), aunque con la diferencia que los Packers si ganaron un partido de playoffs.
Los Packers sorprendieron a los Cowboys 48-32 en la ronda de comodines para obtener su cuarta victoria consecutiva y terminar con el invicto de 16 partidos que el equipo de la estrella solitaria acumulaba en el AT&T Stadium.
En la ofensiva de Green Bay, seis de los 11 titulares del domingo pasado eran novatos o con un máximo de dos años de experiencia dentro de la liga. El quarterback Jordan Love completó 15 de sus 16 pases con receptores novatos o de segundo año.
Más de 15 jugadores en la plantilla de los Packers nacieron en el año 2000 o 2001.
El cornerback, Carrington Valentine, cumplió 22 años en septiembre.
Los Packers son el primer equipo desde la fusión AFL-NFL que tiene cuatro novatos que atrapan al menos 30 pases: Jayden Reed (64), Dontayvion Wicks (39) y los alas cerradas Luke Musgrave (34) y Tucker Kraft (31).
Green Bay también es uno de los dos equipos desde 1994 en llegar a los playoffs con tres o menos jugadores que cuentan con 30 años o más junto con los Cowboys de 2018, según Stathead.
El equipo que el gerente general de los Green Bay Packers, Brian Gutekunst, reunió para iniciar la era de Jordan Love tiene sangre millennial y de la Generación Z para que todos puedan crecer a la par.
