Miles de migrantes han cruzado a Estados Unidos en los últimos días, desde California y Texas, y muchos más aún llegan en autobuses y trenes de carga a ciudades fronterizas mexicanas, inmediatamente después de flujos migratorios récord más al sur.
El dramático aumento a lo largo de la frontera –especialmente en San Diego, California y las ciudades texanas de El Paso y Eagle Pass– marca un punto de inflexión después de que las cifras se desplomaron en los últimos meses, y podría crear nuevos desafíos políticos para el presidente estadounidense Joe Biden de cara a las elecciones.
En mayo, Biden implementó una nueva política para disuadir los cruces ilegales, incluida la deportación de migrantes y la prohibición del reingreso durante cinco años, mientras su administración lidiaba con la migración en niveles récord.
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🇺🇲 | LO ÚLTIMO: Los cuerpos de dos inmigrantes, incluido un niño de 3 años, fueron retirados del Río Grande después que se ahogaron mientras intentaban cruzar ilegalmente la frontera, dijeron funcionarios de Texas. pic.twitter.com/EMVMzSib93
— Alerta Mundial (@AlertaMundial2) September 21, 2023