Policías municipales de Tizayuca, Hidalgo, iniciaron un paro de labores para exigir la destitución de mandos.
Previo a los festejos patrios los uniformados bloquearon las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública en demanda de ser atendidos por la alcaldesa Susana Ángeles Quezada.
Piden mejores condiciones laborales y el cese de hostigamientos y abusos de autoridades como el director Marcos Manuel Sánchez Garay, de quien exigen su cese.
Denunciaron también que carecen de armamento y equipo suficiente para combatir a los delincuentes.
López-Dóriga Digital