El Congreso de Estados Unidos quebró ayer un estancamiento de tres décadas al aprobar una ley de control de armas de fuego, menos de 24 horas después de que la Corte Suprema reafirmara el derecho a su porte en público.
La Cámara de Representantes, con mayoría demócrata, votó a favor de la ley que ya había sido adoptada en la noche del jueves por el Senado y que representa el primer intento importante para regular las armas de fuego desde 1994.
La votación parlamentaria se produjo horas después de que la mayoría conservadora de la Corte Suprema anulara una ley de Nueva York, con un siglo de antigüedad, que exigía permisos para portar armas de fuego en público.
El controvertido tema del control de armas fue reavivado por dos matanzas que tuvieron lugar en mayo, una en Búfalo, Nueva York, que dejó 10 afroestadunidenses muertos, y la otra en Uvalde, Texas, con 21 víctimas mortales, entre ellas 19 niños.
El presidente de EU, Joe Biden, consideró la ley como un avance tras casi 30 años de infructuosos esfuerzos.
Esta ley bipartidista ayudará a proteger a los estadounidenses”, dijo Biden en un comunicado poco después de la votación del Senado. “Niños en las escuelas y comunidades estarán más seguros gracias a ella”.
Excelsior