El papa Francisco lamentó que en algunas comunidades religiosas se viva “un auténtico infierno” de celos, envidias y luchas de poder, durante la audiencia que mantuvo con los misioneros combonianos en el Palacio Apostólico.
“Muchas veces, lo digo con pesar, y hablo en general, no de ustedes porque no los conozco, encontramos que algunas comunidades religiosas son un verdadero infierno, un infierno de celos y lucha de poder”, afirmó ante los participantes en el 19º capítulo de esta congregación.
Francisco previamente había considerado que “la misericordia y la ternura son lenguajes universales que no conocen límites” pero que deben ser “cuidados no solo en el plano persona, sino también en el estilo comunitario”.
“¿Y el amor dónde está? Es curioso, estas comunidades religiosas tienen reglas, un sistema de vida, pero falta el amor”, lamentó, sin especificar una en concreto.
Por eso, el pontífice argentino emplazó a los combonianos a optar por el amor y el perdón, porque que es, dijo, “lo que atrae a la gente”.
“Hay mucha envidia, celos, lucha de poder, y el perdón es mejor, es el testimonio del amor, que es lo que atrae a la gente. El amor entre nosotros, que no nos disparemos los unos a los otros sino que siempre sigamos adelante”, concluyó.
López-Dóriga Digital