El viernes Rusia anunció que iba llevar a cabo, bajo la supervisión de Vladimir Putin, maniobras de su “fuerzas estratégicas”, incluyendo disparos de misiles balísticos y de crucero, en plena crisis con los países occidentales en torno a Ucrania.
“El 19 de febrero, bajo la dirección del comandante supremo de las Fuerzas Armadas rusas Vladimir Putin, se organizará un ejercicio planificado de las fuerzas de disuasión estratégicas”, informó el ministerio de Defensa.
Según Moscú, en el marco de estos ejercicios “tendrán lugar disparos balísticos y misiles de crucero”, también implicarán a soldados del distrito militar Sur de Rusia, fuerzas aeroespaciales, fuerzas estratégicas y las flotas rusas del Norte y del mar Negro.
El objetivo de estas maniobras, según el ministerio, “probar el nivel de preparación” de las fuerzas involucradas y la “fiabilidad de las armas estratégicas nucleares y no nucleares”. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, garantizó que se trata de “un entretenimiento regular” que ha sido “notificado a diversos países por varias vías”.
Peskov agregó que Putin asistirá a estos ejercicios desde un centro de mano espacial.
Y es que las fuerzas “estratégicas” rusas, sirven para responder a las amenazas inclusive en caso de una guerra nuclear, estas son equipadas con misiles, bombarderos, submarinos, buques de superficie y una aviación naval como misiles convencionales.
Estas maniobras tienen lugar en plena escalada de tensiones con los países occidentales, que acusan a Moscú de haber desplegado 150.000 soldados en la frontera con Ucrania para invadir la antigua república soviética.
Moscú niega estas intenciones y anunció desde el martes una serie retirada de sus tropas, pero sin convencer a los accidentales.
-Excélsior