El titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Santiago Nieto, explicó que está investigando tramas de corrupción en el gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018) y aseguró contundente que el expresidente será denunciado si se hallan indicios que lo vinculen.
“No (investigamos) directamente sobre él, pero (sí) sobre todo el gobierno. Si aparece Peña Nieto en las investigaciones, por supuesto que será denunciado ante las instancias competentes”, dijo en entrevista con Efe el titular de este organismo, dependiente de la Secretaría de Hacienda, que persigue el lavado de dinero en el país.
En su despacho, donde está vetado el acceso de celulares y cámaras, Nieto aseguró que durante la administración anterior “la corrupción era sistemática” y que se utilizaban las instituciones del combate a la corrupción para “extorsionar a empresarios y otras personas”.
Además, dijo que en 2016 se creó un Sistema Nacional Anticorrupción como “estrategia de simulación” ya que no se tenía “información fiscal ni financiera de los servidores públicos”.
En 2018, Andrés Manuel López Obrador llegó al poder con un vehemente discurso contra la corrupción, pero diluyó las esperanzas de muchos al anunciar que solo investigaría a Peña Nieto si los mexicanos lo decidían en una consulta ciudadana.
“El presidente López Obrador me ha dicho que tenemos que tener una política de cero tolerancia a la corrupción y a la impunidad. Si (Peña Nieto) aparece en algunas de las investigaciones, se tendrá que proceder en consecuencia”, reiteró Nieto.
Lozoya, el gran golpe
Hasta el momento, el golpe más mediático contra la corrupción del gobierno anterior ha sido el caso de Emilio Lozoya, director de Petróleos Mexicanos (Pemex) durante buen parte del mandato de Peña Nieto, que la semana pasada aceptó su extradición a México desde España, donde fue capturado en febrero.
La UIF presentó ante la Fiscalía mexicana cuatro denuncias contra Lozoya, entre las cuales está el haber recibido sobornos de la constructora brasileña Odebrecht y haber participado en la venta fraudulenta de una planta de fertilizantes.
“Emilio Lozoya es un caso importante (…) pero no es el único caso”, subrayó Nieto.
Dijo que gracias a denuncias de la UIF se logró “que cayera” el exlíder del sindicato de Pemex Carlos Romero Deschamps -quien renunció a su cargo sindical tras más de 25 años-, así como el exministro de la Suprema Corte, Eduardo Medina Mora.
Además, denunció una trama de corrupción entre la constructora OHL y el secretario de Comunicaciones y Transportes del Gobierno anterior, Gerardo Ruiz Esparza, quien falleció el pasado abril, aunque la demanda “persiste en sus círculos cercanos”.
Y dijo haber “colaborado” en órdenes de captura de políticos estatales como el exgobernador de Chihuahua César Duarte, arrestado el pasado miércoles en Florida, Estados Unidos.
“Peña Nieto decía que la corrupción era cultural. Claro, si tus amigos son todos corruptos, piensas que es cultural. Pero el tema no es cultural, es estructural”, esgrimió Nieto.
Tras el dinero del narco
El bloqueo el mes pasado por parte de la UIF de casi dos mil cuentas bancarias asociadas al poderoso Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) evidenció que el gobierno ya no solo persigue a los líderes de los cárteles sino también busca el dinero del narcotráfico.
“Lo que hemos hecho ha sido un cambio de la estrategia para ir sobre las estructuras financieras”, explicó Nieto, quien recordó que la UIF también bloqueó cuentas de 330 personas vinculadas al Cártel de Sinaloa y otras cuentas de José Antonio Yépez “El Marro”, líder del Cártel de Santa Rosa de Lima.
El pasado 27 de junio, el CJNG mostró su furia con un atentado contra el jefe de la Policía de Ciudad de México, Omar García Harfuch, en el que sobrevivió el funcionario pero murieron tres personas.
Tras el ataque, trascendió que varios funcionarios mexicanos han sido amenazados por el cártel en las últimas semanas, entre ellos Santiago Nieto.
“Se hizo el planteamiento de que varias personas teníamos alguna amenaza, pero es lo único que sé”, explicó Nieto, quien fue al hospital a visitar a García Harfuch, herido con tres impactos de bala.
“Era importante dar un mensaje de que estamos juntos trabajando en el combate a los grupos delinuenciales, particularmente el Cártel Jalisco Nueva Generación. Por eso fui a visitarlo al hospital”, reveló.
Santiago Nieto ejerció como fiscal especializado para delitos electorales entre 2015 y 2017, cuando fue cesado tras denunciar que había recibido presiones de Lozoya para que declarara públicamente su inocencia.
López Obrador lo repescó en 2018 para dirigir la UIF.
“Cuando me sacaron de la Fepade (Fiscalía Especializada en Atención de Delitos Electorales), García Harfuch fue de los pocos que me habló para decir que era una injusticia”, rememoró.
-Con información de EFE