Para evitar más contagios de coronavirus se han tomado medidas como el uso obligatorio de cubrebocas en lugares públicos.
Desafortunadamente, no todos hacen caso. Y para ejemplo, el siguiente.
Una empleada de un supermercado le recordó a un señor que debía usar cubrebocas, lo cual molestó al cliente.
Pero el incidente no quedó ahí, pues él no solo se negó a usar cubrebocas, sino que se acercó a la empleada para limpiarse la nariz en la blusa de ella.
Por fortuna, los hechos quedaron registrados en las cámaras de seguridad, con lo que el video se volvió viral y las autoridades pidieron ayudar a localizar al sujeto.
El castigo para el hombre eran 93 días de cárcel o una multa. Finalmente, decidió pagar la fianza por cerca de 60 mil pesos y además no podrá volver a ingresar a ese supermercado.
Aunque aún continuará el juicio en su contra, esperemos que haya entendido la lección.
Excélsior