Los estados deben redoblar esfuerzos para avanzar en el combate a la delincuencia, afirmó Alfonso Durazo.
En el Consejo Nacional de Seguridad, realizado en Palacio Nacional, el funcionario llamó a los gobernadores a no politizar el tema de la seguridad pública y asumir sus responsabilidades.
Sobran circunstancias en las que uno quisiera lavarse las manos, pero o le atoramos juntos o fracasamos por separado. Nadie debe sustraerse a la tarea que le corresponde”, destacó.
Durazo, quien el martes exhibió a los mandatarios que más faltan a las reuniones de seguridad, reconoció que este año no hubo grandes avances en la lucha anticrimen, pero confió en que pronto se pacifique al país.
Tras la sesión del consejo, mandatarios expresaron su rechazo a que se les señale como omisos. “Tampoco estoy de acuerdo con que se esté exhibiendo este asunto, como si por despertar temprano estás cumpliendo o no con tu función. Es un mal mensaje”, dijo Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco.
No hay los resultados deseados, pero se mejoraron los instrumentos del Estado para combatir a la delincuencia
Ha sido un año difícil en materia de seguridad pública, reconoció el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, durante la sesión del Consejo Nacional de Seguridad realizada en Palacio Nacional.
Comentó que los acuerdos alcanzados con los gobernadores en una sesión previa al Consejo serán esenciales para mejorar la seguridad y reconoció que no se han logrado los resultados deseados en esa materia.
Decirles a ustedes que efectivamente ha sido un año difícil en materia de seguridad, es evidente que no hemos logrado los resultados deseados; sin embargo, hemos mejorado sustantivamente los instrumentos del Estado para combatir la inseguridad. Sin esos instrumentos sería imposible aspirar a garantizar prontamente, en el corto plazo, condiciones adecuadas de paz y tranquilidad para las y los mexicanos”, advirtió Durazo.
Insistió en que la corrupción invadió a las corporaciones encargadas de la seguridad pública, lo que quedó demostrado tras la detención de Genaro García Luna y de las investigaciones realizadas por la Unidad de Inteligencia Financiera.
Excélsior