El secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán, afirmó que la fuerza del diálogo y de la comunicación directa permite romper prejuicios y derribar estereotipos, por lo que hay que darle espacio de participación a quien no lo tiene; inclusión a quienes están excluidos, y visibilidad a quienes son ignorados.
Al inaugurar el Primer Simposio Internacional de Desarrollo Turístico Sostenible y Energía, en la Universidad Tecnológica de Tabasco (UTT), y acompañado del Secretario de Educación estatal, Guillermo Narváez Osorio y del rector de la UTT, Lenin Martínez Pérez, Moctezuma Barragán señaló que México requiere una profunda reconciliación nacional, y ésta es una prioridad para el Gobierno de la Cuarta Transformación.
El secretario reiteró su apertura al diálogo, como herramienta fundamental de la SEP, para la proyección de las labores institucionales, por lo que la instrumentación de las reformas legislativas en materia educativa se realizará a partir de la Nueva Escuela Mexicana, que se construye día a día con el apoyo de las maestras, los maestros, los alumnos, las madres y padres de familia y la sociedad en general.
Ante representantes de diversos países, Moctezuma Barragán expuso que el acuerdo entre diversos actores sociales y políticos es lo único que nos llevará a consolidar políticas públicas que realmente conduzcan a algo duradero.
Al dictar la conferencia magistral La Nueva Escuela Mexicana y los tres Méxicos, Moctezuma Barragán consideró que debemos romper con los moldes culturales que los condicionan y reducen. “Cuando hablamos de México y nos preguntamos si es un país rico o un país pobre, cada uno construimos nuestra propia respuesta”, comentó.
Luego de exponer algunos datos socioeconómicos nacionales, el secretario dijo que México es un gran país, pero al mismo tiempo tiene grandes problemas no resueltos. Y una posible respuesta del por qué no se han solucionado, añadió, es porque, en general, las políticas públicas siempre se han diseñado de manera homogénea, como si todo el país fuera igual.
Señaló que, si se quiere hacer un esfuerzo para entender al país, cuando menos se tendría que dividirse en tres Méxicos: el moderno; el tradicional, y el marginado.
Expuso que la principal causa de ello es que, en toda Latinoamérica, y en particular en México, la conquista y la colonia, así como la posterior evolución histórica, generaron una sociedad dividida entre indígenas, mestizos y criollos.
Ese tema, muy evidente pero que no se toca, es algo que todo mundo trata de ignorar o de acallar. Para poder resolverlo, tenemos que hablar de ello, porque inhibe el desarrollo armónico y la superación de la pobreza”, consideró.
Dijo que estos tres Méxicos casi no se hablan. Entonces, cuando se hablen, “todos entendemos lo mismo”. Al hablar entre ellos, señaló, no necesariamente tienen que convencerse; lo importante es que estén sentados dialogando, comprendiendo, escuchando y construyendo juntos.
Porque, definitivamente, “si todos nos sentamos a ver al otro, entonces empezaremos a construir un país armónico. Si resolvemos el conflicto de separación entre estos tres Méxicos, el país no tendrá otra cosa más que un futuro promisorio y en paz”, sentenció.
Para contribuir a lo anterior, agregó, la Nueva Escuela Mexicana a la que convocó a construir el presidente Andrés Manuel López Obrador, se caracteriza por contraponer al espíritu individualista y consumista, un horizonte de valores. Sus dos pilares fundamentales son la excelencia y la equidad.
Afirmó que se adoptará un modelo pedagógico que acentúe la equidad; que busque el fortalecimiento de las habilidades, las capacidades, las competencias, de cada alumno para que sea y viva mejor.
Un objetivo primordial de la Nueva Escuela Mexicana, es reorientar el sistema educativo nacional para colocar al centro del Sistema Educativo Nacional el aprendizaje de niñas y niños, adolescentes y jóvenes.
La Nueva Escuela Mexicana busca formar ciudadanos que tengan desarrollada su autoestima, su sentido comunitario, un gran orgullo por su identidad cultural y étnica y un profundo amor por México, comentó Moctezuma Barragán en su conferencia magistral.
Debemos, confió el secretario, formar mexicanas y mexicanos honestos, productivos, incorruptibles, que realmente sepan cómo trabajar por su bien y el de toda su comunidad.
Señaló que la Educación Pública garantizará, además de la excelencia y la equidad, el derecho de toda persona para acceder a la educación desde el nivel inicial hasta el superior.
Añadió que la filosofía de la Nueva Escuela Mexicana se trasladará a las Universidades Tecnológicas y en las Universidades Politécnicas, a través de una política educativa basada en los avances de la ciencia, la tecnología y la técnica, y en la tradición pedagógica progresista y universal.
Además, dijo que, la educación ofrecida por estas instituciones puede constituirse como un motor que fomentará un desarrollo económico, social y democrático más robusto, para construir una sociedad más participativa, con mejores índices de salud y satisfacción.
De esta manera, procuraremos un sistema de formación profesional dual, capaz de integrar la experiencia y los intereses de estudiantes, académicos, empresarios y la sociedad en general, para concretar su compromiso con México, concluyó.
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