De acuerdo con la madre de la menor, el agua se llevó primero a la niña, por lo que su padre salió en su ayuda, pero ambos fueron llevados por la corriente del río Bravo
CIUDAD DE MÉXICO.
Un padre y su hija de menos de dos años perdieron la vida al intentar cruzar el río Bravo cerca de la ciudad de Matamoros, según informó este lunes la madre de la pequeña fallecida.
La tragedia ocurrió la tarde del domingo en la ciudad de Matamoros, en el estado de Tamaulipas, aproximadamente a un kilómetro del puente nuevo internacional.
Tania Vanessa Ávalos -madre de la pequeña fallecida, dijo a las autoridades que el agua se llevó primero a la niña y fue su padre quien salió en su ayuda, pero ambos fueron llevados por la corriente del río y desaparecieron.
Miembros de la Secretaría de Marina, de la Policía Estatal y personal de Bomberos, iniciaron la búsqueda de los cuerpos de manera inmediata sin obtener resultados positivos.
El matrimonio de migrantes era originario de El Salvador y estaba conformado por Tania Vanessa Ávalos, por Óscar Alberto Martínez Ramírez de 25 años y por la menor Valeria de un año y 11 meses.
Habían llegado a esta ciudad mexicana para pedir asilo político en Estados Unidos.
Sin embargo, ante la desesperación por la lentitud en los tramites decidieron junto con otros migrantes cruzar el río Bravo, comentó la mujer.
Este lunes 24 de junio aproximadamente a las 10:00 horas, los cuerpos sin vida del padre y de la hija fueron localizados por autoridades estatales, militares y personal de Protección Civil.
El hallazgo tuvo lugar en las orillas del río, entre unas ramas y a unos kilómetros del puente internacional de Matamoros que une esta ciudad con Brownsville (Texas).
Por las imágenes que han trascendido, se presume que el papá logró alcanzar a la niña luego de que la corriente se la arrebató, y la metió debajo de su camiseta.
Sin embargo, ambos murieron ahogados.
Personal de la Unidad General de Investigación inició una investigación y ordenó que los restos fueran trasladados al servicio médico forense para la autopsia.
Enrique Alberto Maciel Cervantes, presidente del Instituto Tamaulipeco del Migrante en Matamoros, dijo que está en comunicación con Tania Vanessa Ávalos y con el Consulado de El Salvador en McAllen Texas, para determinar cómo se va apoyar a esta familia.
Lamentó la tragedia y pidió a los migrantes que no se metan a las aguas del río Bravo ya que las compuertas están abiertas y la corriente es muy fuerte. «El río no ayuda; cobra vidas» advirtió.
Las autoridades todavía no dan a conocer cuándo, cómo y por qué vía van a ser trasladados los restos del padre y la niña.
Miles de migrantes de Honduras, El Salvador y Guatemala, pero también de Cuba, Haití y diversos países africanos y asiáticos, han ingresado desde octubre a México en varias caravanas a través la frontera sur.
Excélsior