El presidente Donald Trump dijo estar impactado al ver las casas sin techo y los árboles derribados durante su recorrido de ayer por las comunidades de Florida y Georgia devastadas por el huracán Michael.
Trump recorrió por aire y tierra las comunidades costeras afectadas, y después ayudó a entregar agua en un centro de distribución que también funciona como albergue temporal.
El Presidente dijo que alguien le describió el huracán Michael como un “tornado muy ancho, extremadamente ancho”.
Miren detrás de ustedes. Vamos, estos enormes árboles simplemente fueron arrancados de la tierra. Es realmente increíble”, dijo.
Inicialmente, Trump y su esposa, Melania, vieron árboles arrancados de raíz y viviendas sin techo después de que su helicóptero despegó de la Base de la Fuerza Aérea Elgin, cerca de Valparaiso, su primera escala.
Pero la severidad de los daños aumentó conforme se acercaban a Mexico Beach, que casi fue borrada del mapa al recibir el impacto directo del huracán.
En Lynn Haven, Trump ingresó a una casa en la que había un enorme pino derribado cerca de la entrada.
El domingo por la noche, la cadena de televisión CBS transmitió una entrevista en la que Trump reconoció que el cambio climático no es un “engaño”, pero aseguró que desconoce si está causado por el hombre y sugirió que el clima “volverá a cambiar”.
El mandatario, que anteriormente había dicho que ese fenómeno era un “invento” de los chinos, aseguró que “algo está pasando”.
No obstante, afirmó que los científicos tienen una “gran agenda política” y argumentó que no quiere perjudicar la economía estadounidense con políticas ecológicas.
Fuente: Excélsior