«Fue el expresidente Juan Manuel Santos quien dio la orden de preparar la acción terrorista para mi asesinato», reiteró el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, quien el pasado sábado cuando sufrió un atentado fallido en medio de un acto público con militares.
Según Maduro, Santos actuó en coordinación con el expresidente del Parlamento venezolano, el opositor Julio Borges, «quien recibe la orden, los recursos, la logística, el apoyo y el plan» y «es quien asume la responsabilidad ante la historia de asesinar al presidente».
Mi asesinato político, mi asesinato físico se decidió en el Palacio de Nariño -sede del Gobierno- de Bogotá. No tengo ninguna duda de eso (…). Todas las investigaciones (…) indican la participación del Gobierno saliente de Colombia en el apoyo, en el entrenamiento, en el traslado, el financiamiento y la preparación del plan», prosiguió Maduro.
El gobernante también señaló como «terrorista» a Borges y aseguró que el opositor forma parte de un grupo de «políticos venezolanos que han ido a arrodillarse y se han puesto al servicio de la oligarquía bogotana y de sus intereses».
Maduro ya había señalado a Santos y a Borges por estos hechos, de los que ambos se han desmarcado, pero avanzó este sábado en sus acusaciones.
El presidente venezolano se refirió también al diputado opositor Juan Requesens, detenido el martes y todavía «desaparecido» según familiares y abogados que no han podido verlo desde la aprehensión.
Según Maduro, las declaraciones que ha ofrecido Requesens y que han sido mostradas por el gobierno a todo el país en cadena obligatoria de radio y televisión, «confirman la participación de Julio Borges en el atentado terrorista» que, dijo, pretendió asesinarlo el 4 de agosto.
El sábado pasado explotaron dos drones en un acto que encabezaba Maduro y el gobernante ha dicho que se trató de un atentado en su contra.
Fuente: Excélsior